Profesores adoptan acciones para terminar con el “agobio laboral”

Docentes hablaron de interminables horas de conexión y de tareas administrativas.

Una campaña de concientización nacional inició el gremio docente respecto de lo que califican como “agobio laboral”.

Ayer durante la mañana, en Punta Arenas, la dirigencia regional y comunal compartió su preocupación por el momento que atraviesan los trabajadores del sector en cuanto al exceso de carga horaria y a las exigencias administrativas.

A esa misma hora, en cada región del país se realizó una actividad similar, punto de partida para una serie de acciones que se mantendrá durante varias semanas.

Los docentes, encabezados por la presidenta regional, Violeta Andrade, expusieron su malestar y preocupación por las condiciones en que se encuentran desarrollando su labor, con jornadas remotas extenuantes y que no sólo requieren de su preocupación por el aula sino también por las diversas exigencias administrativas.

Explicaron que a nivel nacional se tiene un calendario con las diversas acciones que se van a desarrollar en caso de no encontrar en las autoridades una solución a sus problemas, lo que podría desembocar en un próximo paro nacional.

A nivel de Punta Arenas, los dirigentes lamentaron la nula comunicación con el alcalde Claudio Radonich, acusando que no los recibe desde 2018. Asimismo, señalaron que tampoco tienen relación con el seremi de Educación, Rodrigo Sepúlveda, no obstante, esperan que ante la insistencia del nivel central de reiniciar las clases presenciales, el representante regional del sector priorice la protección de la salud de los niños.

Finalmente, adelantaron que para el lunes tienen agendada una reunión con representantes de la Corporación Municipal para abordar éste y otros temas.

Proyecto de ley

Mientras tanto, a nivel central un grupo de diputados de oposición presentó un proyecto de ley que pretende mejorar las condiciones laborales de docentes y asistentes de la educación.

La iniciativa busca extender a los trabajadores las normas sobre trabajo a distancia, pero también adoptar otras medidas, como el derecho a la desconexión por al menos 12 horas continuas; la reducción de la hora pedagógica remota a 30 minutos; que se implementen pausas pedagógicas en la modalidad a distancia para destinar tiempo evaluación de aprendizajes y atención de estudiantes y apoderados; e impulsar protocolos de grabación de clases remotas que resguarden los derechos de todas las personas que integren la comunidad educativa.