El príncipe Harry consiguió trabajo como ejecutivo en una empresa
A los 36 años, el príncipe Harry consiguió su primer trabajo “de verdad”: el nieto de Isabel II fue contratado para formar parte del staff de BetterUp, una compañía de asesoría en salud mental con sede en San Francisco, que trabaja con gigantes estadounidenses.
Después de retirarse de su papel como miembro principal de la familia real el año pasado, el duque de Sussex se convertirá en director de impacto de la compañía de entrenamiento y salud mental BetterUp Inc., informó el diario Wall Street Journal este martes.
“Tengo la intención de ayudar a crear un impacto en la vida de las personas”, dijo el príncipe Harry, quien ha sido abierto sobre sus luchas con la salud mental, en declaraciones al citado medio. “El coaching proactivo brinda infinitas posibilidades para el desarrollo personal, una mayor conciencia y una vida mejor en todos los aspectos”, ha señalado el duque en respuesta a por qué ha aceptado este puesto ejecutivo.
El duque de Sussex también reveló que ha estado usando la aplicación durante un par de meses. “Me conectaron con mi entrenador que, francamente, es realmente increíble y siempre me ha dado buenos consejos y una nueva perspectiva, que es muy valiosa”, dijo.
Se espera que Harry, quien se mudó con su esposa Meghan Markle y su hijo Archie a California el año pasado, pase algún tiempo en la sede de la startup en San Francisco en el futuro, participe en reuniones y aparezca en eventos especiales de la compañía.
En BetterUp, se espera que Harry participe en las decisiones de estrategia de productos y contribuciones caritativas, y defienda públicamente temas relacionados con la salud mental.
La firma se negó a comentar sobre cuánto se le pagará al hijo de Carlos de Gales, pero roles similares en otras firmas de California se pagan con cheques de seis o siete cifras.
Harry dijo en la entrevista que concedió a Oprah Winfrey junto a Meghan Markle que su familia le había cortado la ayuda financiera tras su renuncia a la Corona y que había tenido que utilizar los millones que le dejó Lady Di para poder empezar una nueva vida en Estados Unidos.
“Tengo lo que me dejó mi madre y sin eso, no hubiéramos podido hacer esto”, dijo el príncipe sobre el traslado de la pareja a California, donde viven en una mansión de US$14 millones.
