La letanía de los proyectos irresolutos
– El desarrollo de Punta Arenas y de Magallanes, en general, requiere de autoridades resueltas y audaces, que sean capaces de sortear dificultades, proyectar el crecimiento de la ciudad en varias décadas y de allegar los recursos que sean necesarios para emprender las grandes obras faltantes.
La intendenta Jennifer Rojas planteó, con absoluta honestidad, cuál es la situación de una serie de proyectos que llevan años en carpeta, incluso más de una década. Si bien la franqueza y la transparencia se agradecen, éstas dejaron un sabor salino.
Uno de los temas abordados fue el destino del ex hospital regional. Con diversas iniciativas fallidas, en los últimos años se había barajado su demolición, pero ésta comprometería recursos equivalentes al 60% del presupuesto regional del FNDR. Esta posibilidad, de hecho, ya había sido descartada, al menos para ser emprendida a costa de las arcas regionales.
En reemplazo a dicha opción, se había planteado la posibilidad de vender el predio para un proyecto habitacional y/o comercial, considerando la excelente ubicación del terreno y su añoso edificio. Pero, nuevamente la máxima autoridad hizo ver que no ha habido privados interesados. Seguramente, el alto costo de demoler la vieja edificación desalienta cualquier proyecto empresarial.
¿Qué se hará, entonces, con el ex hospital regional?
Cuestión de costos también comprometen la realización de la vía elevada sobre la ruta 9 norte, a la altura de Avenida Eduardo Frei. Frente a ello, la intendenta sólo expone que dichos recursos, al ser sectoriales del ministerio de Obras Públicas, no pueden ser usados por el gobierno regional.
¿Qué pasará, entonces, con la solución vial para el conflictivo cruce?
¡Del Centro Antártico Internacional ni hablar! Al menos, durante lo que queda de este gobierno. Desde que llegó Piñera a su segundo mandato quedó más que claro que nada relacionado con el Cai iba a prosperar, si bien las autoridades regionales eludían admitirlo diciendo que se está buscando la forma de financiarlo.
El desarrollo de Punta Arenas y de Magallanes, en general, requiere de autoridades resueltas y audaces, que sean capaces de sortear dificultades, proyectar el crecimiento de la ciudad en varias décadas y de allegar los recursos que sean necesarios para emprender las grandes obras faltantes.
En caso contrario, seguirá pasando lo ocurrido la semana pasada, al saberse que Chile será sede del encuentro de ciencia polar más importante del mundo y que Punta Arenas no lo albergará porque carece de algo tan básico para una ciudad con tan afamada ubicación: un centro de convenciones.
