Comisión de Forma de Estado aprueba en general que Chile será un “Estado regional”

“La creación de asambleas legislativas regionales, de órganos de representación, supone una mirada distinta del poder. Es la verdadera sala de máquinas”

La instancia despachó en general todas las iniciativas correspondientes a la forma
jurídica del Estado. Se aprobaron también las “asambleas legislativas regionales”.

Luego de 28 votaciones consecutivas, la Comisión de Forma de Estado finalizó ayer la discusión en general de las normas correspondientes a la forma jurídica del Estado y definió preliminarmente que Chile será un Estado regional. 

Todavía no es definitivo: falta aún la discusión y votación en particular dentro de la comisión y la deliberación y votación en el pleno del órgano constituyente, pero los respaldos entregados en la jornada de ayer demuestran que hay un consenso grande y transversal en cuanto a algunos lineamientos, como darle mayor autonomía a las regiones.

“Hoy, después de anunciar ayer (por el miércoles) que íbamos a votar, fue histórico, es un día histórico. En mi condición de coordinador solamente manifestar el privilegio, el honor de haber nacido en esta época en Chile, poder vivir esta etapa, sobre todo para escribir la nueva Constitución donde aprobamos los artículos que tienen que ver con la Forma de Estado”, dijo Adolfo Millabur (mapuche), uno de los coordinadores de la instancia, al concluir la sesión. 

La instancia votó una norma que establece que Chile “es un Estado Regional conformado por entidades territoriales autónomas, en un marco de equidad y solidaridad entre todas ellas, preservando la unidad e integridad del Estado”, lo que se aprobó con 21 votos a favor, uno en contra de Pollyana Rivera (Udi) y tres abstenciones de Alvaro Jofré (RN), Geoconda Navarrete (Evópoli) y Harry Jürgensen (RN). 

Con 24 votos a favor y una abstención de Pollyana Rivera, también se despachó en general un artículo que dice que “Chile, en su diversidad geográfica, histórica y cultural, forma un territorio único e indivisible, conformado por el territorio continental, territorio insular y el territorio antártico chileno; sus suelos, subsuelos, espacio aéreo y maritorio”. 

No obstante, la primera norma en votarse era una que promovía Vamos por Chile que proponía un “Estado de Chile unitario” y que el gobierno central será “funcional y territorialmente descentralizado”, que logró 18 rechazos, tres abstenciones de Jorge Arancibia (Unidos por Chile), Jofré y Navarrete; y cuatro votos a favor, de Eduardo Castillo (Colectivo del Apruebo), Jürgensen, Mena y Rivera. 

También se rechazaron partes de una norma que promovía el Colectivo del Apruebo y establecían también un “Estado unitario”.

“Estamos contentos y contentas, a ratos emocionados, luego de 188 años de historia, hoy le hemos puesto el fin al Estado unitario, a este Estado unitario que ha mantenido las inequidades territoriales a pesar de las distintas políticas públicas de descentralización bajo el alero de la Constitución de 1980, de manera que estamos transitando, aprobando en general, a este Estado regional”, aseguró Claudio Gómez (Colectivo Socialista).

Las características del “Estado regional” 

Dentro de las normas aprobadas, hay algunos puntos fundamentales para el establecimiento del Estado regional, por ejemplo la definición de las “regiones autónomas”. 

Sobre eso, la comisión aprobó por 20 votos a favor y cuatro abstenciones (Alvaro Jofré, Harry Jürgensen, Felipe Mena y Geoconda Navarrete) que “son entidades políticas y territoriales, dotadas de personalidad jurídica de derecho público, autonomía financiera y patrimonio propio. Cuentan con las potestades y competencias administrativas, legislativas, reglamentarias, ejecutivas y fiscalizadoras necesarias para autogobernarse, en el ámbito de sus competencias, con arreglo a lo dispuesto en la Constitución y la ley”. 

Sin embargo, otra norma aprobada por unanimidad estipula que “en ningún caso el ejercicio de la autonomía permitirá la secesión territorial”. Asimismo, la comisión respaldó dos propuestas de entes territoriales con representación popular, un “asamblea legislativa regional” o una “asamblea social regional”, dado que se aprobaron ambas alternativas. La primera plantea la creación de un órgano que dicte leyes para las regiones autónomas, debata, apruebe o rechace el Plan de Desarrollo Regional, fije impuestos según lo que dictamine la Constitución, y fiscalice actos del Gobierno Regional, entre otros puntos. 

La segunda tiene un foco más acentuado en la fiscalización. 

Según lo aprobado, la elección de esos cargos debería ser popular y respetar criterios de paridad y de representación de pueblos indígenas. Ninguna de esas normas contó con el respaldo de los convencionales de Vamos por Chile.

“La creación de asambleas legislativas regionales, de órganos de representación, supone una mirada distinta del poder. Es la verdadera sala de máquinas. Cuando se dice que lo más relevante de una Constitución es la sala de máquinas, creo que con mis compañeros de la Comisión 3 coincidimos que la verdadera sala de máquinas es la división territorial del poder y es una decisión que esta comisión adoptó con amplias mayorías que esperamos que se reflejen en el pleno”, opinó Amaya Alvez (FA), vicepresidenta adjunta e integrante de la comisión.

El concepto de “maritorio

Otro de los artículos aprobados -por unanimidad- es el que consagra el concepto de “maritorio”, que abarca ecosistemas marinos y marino-costeros continentales, insulares y antárticos, la zona costera, aguas interiores, el mar territorial, la zona contigua, la zona económica exclusiva, la plataforma continental y, en general, el litoral”.

El 2 de febrero la comisión comenzará el proceso de votación en particular, para lo cual los convencionales deben ingresar indicaciones a lo aprobado y el secretario de la instancia deberá construir un documento “comparado”, donde se encuentren todas las propuestas y modificaciones presentadas.

Emol