La emoción fue parte del pre estreno de filmes originales restaurados de José Böhr y Antonio Radonich

Félix Iglesias
Corresponsal en Porvenir

Maravillados y gratificados se sintieron los casi 50 espectadores (permitidos por el aforo sanitario) que asistieron al Cine Concierto “Colección Magallanes Films”, ofrecido en el Teatro Cinema de Porvenir, evento de pre estreno de la versión restaurada de las filmaciones originales de los creadores regionales José Böhr y Antonio Radonich, en escenarios de Punta Arenas, islas Navarino y Dawson, canales magallánicos, Ultima Esperanza y en su ciudad base, Porvenir, entre 1918 y 1923.

Las preciadas imágenes, que constituyen un documento histórico invaluable, ya que retratan a personas, locaciones, paisajes, costumbres, actividad industrial, sucesos y, sobre todo, el testimonio gráfico de una época en la zona más austral de Chile a inicios del siglo XX, son también las primeras películas documentales del país. Además, el corto humorístico “Como por un Tubo”, también exhibido en la oportunidad, forma parte de los primeros registros fílmicos argumentales, especialmente elaborados con una narrativa de ficción a nivel nacional.

La actividad fue posible gracias a la Cineteca Nacional de Chile, la Fundación ProCultura y el propio Teatro Cinema, lugar elegido para el pre estreno, en vez de hacerse en otros puntos de mayor actividad como el Centro Cultural Palacio La Moneda, en Santiago, o cines de Punta Arenas.

Los rollos de películas de 35 milímetros originales fueron hallados hace pocos años en el antiguo biógrafo Cinema Porvenir -mantenidos en sus cajas protectoras desde el cierre del inmueble, a inicios de los años ‘70- por el sobrino nieto de Antonio Radonich, Ronnie Radonich.

El también cineasta, consciente del valor patrimonial y cultural que tenían los antiguos celuloides, los entregó a los laboratorios de la Cineteca Nacional, donde se restauraron los originales, gracias al apoyo económico del Programa de Resguardo del Patrimonio Audiovisual del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio (Mincap). Posteriormente, como explicó el coordinador de preservación de la Cineteca Nacional, Pablo Insunza, fueron digitalizados cuadro a cuadro y se terminó de limpiar las manchas de hongos y rayones que acumularon con el paso del tiempo, dándole continuidad a las escenas faltantes, para entregar sendos archivos multimedia con cada uno de los registros fílmicos, enteramente consistentes, como lo fueran en su momento.

Trabajo minucioso
de restauración

Insunza dijo que los registros, los primeros del cine chileno, fueron parte de un trabajo de dos años, que una vez permitido por Ronnie Radonich fue postulado al Fondo Audiovisual, restaurando cada una de las piezas “que estaban bastante desordenadas, algunos son fragmentos de descartes que reincorporamos a las películas, unas mezcladas con otras. Poco a poco fuimos identificando cada material hasta llegar a lo que vimos hoy día”, precisó.

Por otro lado, señaló que esta exhibición permitió descentralizar los trabajos de la cineteca, siendo muy importante que los primeros registros sean de Tierra del Fuego y la Región de Magallanes.

Insunza añadió que los celuloides de Böhr y Radonich reúnen muchos valores. Entre éstos, el que si no existieran no se conocería de la realidad de época, al mostrar la sociedad en un momento histórico del país en la zona austral; luego, el trabajo de cámara, de luz y cuidados por los registros, que denotan experiencia en la tarea fílmica de los autores, con un trabajo previo detrás. “Todas las ‘actualidades’, logramos rescatar acá ocho de 13, las otras no se encontraron, van dando cuenta del momento de la vida en la región, cómo éramos hace 100 años atrás”.

La emoción de
Ronnie Radonich

Ronnie Radonich -quien al intervenir en el ecrán del Cinema Porvenir se emocionó presentando la exhibición, por ser un momento que esperó tanto tiempo- indicó que “es muy bonito por múltiples factores: el hecho que las películas se exhiban en el cine que hizo Antonio (Radonich), que por fin después de hace 10 años se hayan restaurado como es debido, con una musicalización genial de Variante Jazz Trio que será incorporada a este registro”.

Valoró el trabajo técnico de Radonich y Böhr, al igual que hayan filmado en alta mar, sobre un tren, que hayan hecho películas con explosiones y persecuciones en auto y moto, con la cámara que está en el Museo de Porvenir”, se interrumpió visiblemente emocionado.

“Aparte del tema histórico y patrimonial, tenían elementos como la escena del cabaret que está grabada en exterior, como un falso interior. Entonces, tienen elementos que hoy día igual cuestan… todo fue muy bonito, que haya llegado la gente que vino, entre ellas personas que actuaron en el cine y conocieron a Antonio, es bien emocionante para mí, para mi familia y para ProCultura y gracias a la Cineteca Nacional, que esta producción es gigante. Teniendo tantos otros lugares donde podrían exhibirla más fácil, que lo hayan hecho acá, encima con todos los problemas del Covid-19, incendio forestal y todo, fue muy emocionante”, cerró el conocido gestor cultural fueguino.