Anuncian flexibilización de protocolos en restaurantes en comunas en Fase 2
Hoy 12 de febrero comienza a regir la nueva normativa que amplía la cantidad de personas que pueden permanecer en la mesa de un restaurante, cafetería o espacio análogo. Hasta ayer, todas las mesas contaban con una capacidad máxima de 2 personas por mesa, lo cual evidentemente ha traído perjuicios en las ventas de estos negocios.
La medida amplía a 5 la capacidad de personas por mesa, siempre y cuando estas pertenezcan al mismo núcleo o ‘burbuja’ familiar. Este cambio a la normativa sanitaria es un respiro para el rubro gastronómico de la región, considerando que las comunas de Porvenir, Puerto Natales y Punta Arenas se encuentran en la Fase 2, que restringe fuertemente las medidas de aforo.
El anuncio fue realizado por el ministro (s) de Economía, Fomento y Turismo, Julio Pertuzé, junto al presidente de la Asociación Chilena de Gastronomía (Achiga), Máximo Picallo. La actualización mantiene la exigencia de los protocolos sanitarios establecidos por la autoridad de Salud, como el uso del Pase de Movilidad para personas a partir de los tres años y el distanciamiento de dos metros entre mesas.
“Con el Ministerio de Salud, hemos acordado que, para grupos familiares, padre o madre con niños pequeños menores de 18 años con su esquema de vacunación completo, van a poder sentarse al interior con un máximo de cinco personas por mesa. Esta es una medida que tiene razón sanitaria; duermen bajo el mismo techo, llegan en el mismo transporte, así que no supone un mayor riesgo sanitario. Por otro lado, también es importante recordar que estamos en vacaciones, que las vacaciones son familiares y esas personas necesitan poder juntarse para disfrutar de la buena mesa en este periodo estival”, explicó el ministro de Economía (s) Julio Pertuzé.
El actual protocolo, que establece restricción de personas por mesa en la Fase de Transición e impide la asistencia al interior de restaurantes de grupos familiares, impacta la operación de este tipo de comercio, ya que se calcula que los ingresos de los restaurantes en comunas que se encuentran en fase de transición han bajado entre un 30 y un 50%.