Centro Quemanta trabajará con invernadero inclusivo
Con la misión de desarrollar sus funciones cognitivas a través de la agroterapia, el Centro Quemanta inauguró su invernadero inclusivo para personas mayores con demencia. Este trabajo se concretó gracias a un proyecto desarrollado por la Fundación Magallania.
La kinesióloga del Quemanta, Jasna Kusanovic Delgado, destacó que ahora están en el proceso de implementarlo para poder comenzar su trabajo el próximo verano y también se busca la compra de materiales y de semillas. “Siempre estamos abiertos a recibir donaciones, y también estamos viendo la posibilidad de compra, pero eso se va a demorar un poco”, subrayó.
En cuanto al proyecto, indicó que profesionales se acercaron al Centro para ver sus necesidades y en acuerdo con el equipo se acordó contar con el invernadero, que obtuvieron gracias a un proyecto al que postuló la Fundación Magallania y que se ejecutó a través de la constructora G&S.
Por su parte, la terapeuta ocupacional de Quemanta, Jazmín Muñoz Cárcamo, planteó que la iniciativa tiene un gran impacto para los usuarios, que son adultos mayores y con patologías de demencia. “Este proyecto nos permite desarrollar capacidades en áreas que quizás en el día a día no podemos realizar, la horticultura y la jardinería son destrezas que ellos tienen muy arraigadas, incluso más que nosotros, y por eso esto permite desarrollar actividades que los enriquece en gran medida”, puntualizó.
El presidente de la Fundación Magallania, Mario Zenteno, apuntó que propusieron la construcción de un invernadero que en su diseño incorporó características inclusivas para desarrollar agroterapia en adultos mayores con demencia.
“Este fue un proyecto que en su origen fue financiado con fondos presidenciales a través del Ministerio del Interior. Nosotros como Fundación Magallania, trabajamos con proyectos de innovación social, la génesis del proyecto buscaba traer fondos públicos que están centralizados y traerlos a la región. Nos asociamos con unos amigos y realizamos este invernadero, que en su concepción tiene un carácter inclusivo”, complementó.
Son 60 adultos mayores, con demencia que puede ser leve o moderada, los que asisten al Centro Quemanta, que funciona en el complejo Miraflores. Es una institución que trabaja con distintos planes de estimulación para retardar los efectos de la demencia, pero que además involucra a las familias para entregarles herramientas que les permitan enfrentar de mejor manera este diagnóstico.
Quemanta, cuyo nombre en lengua selknam significa “Espíritu del árbol vivo”, busca contribuir a lograr una mejor calidad de vida de usuarios y de sus cuidadores.
El proceso de intervención dura casi un año.
La demencia es una condición adquirida y crónica, caracterizada por el deterioro de diversas funciones cerebrales, que se acompaña de síntomas cognitivos, psicológicos y cambios conductuales. Estos síntomas repercuten en la capacidad de las personas para llevar a cabo sus actividades habituales, pudiendo requerir apoyo de terceros e incluso comprometer su autonomía y participación familiar y social. Esta situación genera dificultades en la relación con el medio social y estigmatización, lo que conduce a la exclusión de las personas afectadas de las instancias de participación social cotidiana y conlleva a un mayor nivel de aislamiento y fragilidad, lo que también afecta la calidad de vida de los familiares.