Proyectan ampliar el consultorio Carlos Ibáñez en terrenos del Pudeto

Una de las mayores dificultades para ampliar los centros de salud en Punta Arenas lo constituye la falta de espacios hacia donde crecer. Es el caso del consultorio Carlos Ibáñez que ha luchado años para ampliar sus actuales instalaciones. Para ello, se han buscado distintas opciones, y si bien en una primera instancia se planteó la alternativa de crecer hacia los terrenos aledaños, hoy se daría la posibilidad de construir en un predio del Ejército, ubicado en diagonal al recinto médico, que está en vía de ser enajenado.

Su directora, Gloria Ramírez, señaló que uno de los proyectos que buscan desarrollar este año es la normalización del dicho centro de salud, razón por la cual se han realizado una serie de reuniones con el alcalde Claudio Radonich, y con el gobernador Jorge Flies para avanzar en esta materia.

“El tema es que no teníamos terreno. Se evaluó la posibilidad de ampliar hacia un sitio aledaño al establecimiento, pero ello no se concretó por distintas razones. Frente a ello, el gobernador regional se comprometió a entregarles otro, que estaría ubicado en terrenos del Regimiento Pudeto”, enfatizó Ramírez.

El cambio de ubicación les permitiría aumentar de manera importante su población percapitada. 

Avanzar en calidad

Otro de los proyectos que desarrollará el establecimiento de salud durante este año, tiene que ver con el proceso de acreditación en calidad, que inició en 2019, pero que estuvo detenido por la pandemia.

La calidad es una de las exigencias del sistema de Garantías Explícitas en Salud (Ges), que aún no es obligación para la atención primaria de salud, pero sí en algunos años más será obligatorio para todos los centros de salud que atiendan patologías de este sistema. De las 85 patologías que están incluidas en este sistema, alrededor de 15 se diagnostican en la atención primaria de salud, dentro de eso las más frecuentes son la diabetes y la hipertensión.

“Cuando un usuario se diagnostica con alguna de estas patologías, se le explica la patología y se le informa de este sistema, que además le entrega garantías de acceso oportunidad y financiamiento. La cuarta es la de calidad. Eso significa que tenemos que cumplir ciertos estándares de calidad para darle una seguridad mayor”.

Atenciones
domiciliarias reforzadas

La directora acotó que cuentan con mucho personal de refuerzo, pues se han mantenido los funcionarios destinados a realizar atenciones domiciliarias.

Sobre esto último, añadió que si bien hay una alta cantidad de pacientes con dependencia (120) en el Programa Punta Arenas te Cuida, hay otros con dependencia moderada a quienes se les realizaron controles en domicilio o entrega de medicamentos. “Antes de la pandemia no teníamos cómo entregar una atención y con estos refuerzos Covid, se ha podido lograr”.

Vulnerabilidad 

La directora sostiene que hay muchas otras necesidades que han ido surgiendo con la pandemia, admitiendo que dicho establecimiento tiene una población súper vulnerable.

Al respecto, destaca que el 40% de sus usuarios tiene algún tipo de vulnerabilidad social, siendo las que más destacan la violencia intrafamiliar, alcoholismo o adultos mayores sin redes de apoyo y la pobreza. “Hay muchos adultos mayores que viven solos, abandonados por su familia, y aunque no tienen un grado de dependencia, requieren apoyos más allá de la atención clínica”.

Advierte que son usuarios que sienten que lo más cercano es el centro de salud, entonces hay muchas necesidades sociales. En esto la atención primaria juega un rol fundamental, más allá de lo clínico. Muchos adultos mayores no sabían como solicitar su Ingreso Familiar de Emergencia (Ife), lo cual escapa de la atención de salud, pero las trabajadoras sociales los ayudaban y los acompañaban. También tuvieron que preparar muchas canastas familiares y llevar a cabo operativos de recolección de alimentos, que permitieron entregar más de 600 cajas con víveres. “Como la gente sabe que somos el centro más cercano a su domicilio consulta por todo, e incluso atención en otras instituciones, porque no tienen acceso a Internet, ni menos contaban con redes familiares”, sostuvo Gloria Ramírez.