Greenpeace constató pérdida de hielo antártico más grande para esta época del año
El Arctic Sunrise (amanecer ártico) es uno de los dos barcos de Greenpeace que navega por el mundo. Tiene las características de ser un barco y por estos días está utilizando el puerto de Punta Arenas como centro de operación logística para la investigación.
Por eso mucha gente ha tenido la ocasión de verlo “fondeado” frente a la bahía de nuestra ciudad. Y así será, al menos por todo marzo, porque va y viene.
“Punta Arenas es por ahora nuestro centro de operación logística para la investigación que se está realizando en aguas profundas, con equipos submarinos de avanzada, para documentar la biodiversidad de los fondos marinos que aún no están protegidos en la zona polar, fundamentalmente en el mar de Weddell y en otros lugares aledaños”, informó a La Prensa Austral, Matías Asun Hamel, director nacional de Greenpeace en Chile.
Sobre el Arctic Sunrise dijo que es un rompehielos, especial para navegaciones polares.
A propósito de los viajes y labor que están realizando los científicos, Asun resaltó que “en los últimos días el barco fue testigo de un fenómeno que se esperaba, y que es básicamente uno de los puntos más bajos de congelamiento. Es muy preocupante la constatación de pérdida de hielo antártico en esta época. Pasamos de tener 2,21 millones de kilómetros cuadrados a 1,98. Y este derretimiento está afectando a todo el planeta. Por lo mismo es fundamental proteger, no sólo los océanos, sino que todos los ecosistemas del planeta”.
En este caso la investigación la realizan enfocados en los primeros días de marzo, cuando comienza la cuarta ronda de negociaciones de los tratados de Naciones Unidas, de protección de los océanos, donde necesitamos que salga bien, y que haya humo blanco para protección de los océanos”, resaltó Asun.
“En términos generales lo que estamos buscando es documentar, y con ello aumentar la presión para lograr un Tratado Antártico, que garantice protección efectiva y creación de áreas protegidas, literalmente en los océanos más importantes que tenemos en esta zona del planeta. En este caso el océano antártico, base fundamental de las cadenas alimentarias”.
El trabajo que despliegan los científicos a bordo de este buque, le ayuda a Greenpeace al levantamiento de información científica, que para ellos es clave en áreas inexploradas. “Para esto contamos con mini submarinos y una gran capacidad técnica. Esto asemeja las investigaciones que hemos realizado en otras partes del mundo, con excelentes resultados, descubriendo además biodiversidad amenazada con el cambio climático”, resaltó Matías Asun.
La alerta sobre la situación climática de la región
El equipo de Greenpeace, a bordo del barco Arctic Sunrise, alertó sobre la situación climática de la región.
La expedición que llevan a cabo se enmarca en el tour de la campaña mundial para pedir un Tratado Global de los Océanos (la creación de una red de santuarios marinos) libres de actividad humana dañina, en aguas internacionales) que podría ser realidad en la Onu este próximo mes de marzo.
Este texto fue tomado de la página web www.greenpeace.org/chile/ y en él se advierte que “las poblaciones de pingüinos están siendo afectadas de manera muy grave por la rapidez del impacto del cambio climático en la Antártica. Durante este mes la expedición confirmó que los pingüinos papúa o Juanito (Pygoscelis papua) se están reproduciendo más al sur como consecuencia de la crisis climática. Se trataría del registro más meridional de pingüinos Juanito reproductores en el lado oriental de la Península Antártica”.
“En 2020 Greenpeace también descubrió que las colonias de pingüinos barbijo en la isla Elefante se habían desplomado, y algunas de ellas habían disminuido en el número de individuos, hasta un 77% en los últimos 50 años”.
Un refugio climático
para los pingüinos
“Durante este tour el barco Arctic Sunrise navegó hacia el mar de Weddell y permitió confirmar que la zona se mantiene como un refugio climático para los pingüinos. Recientemente un equipo de científicos de la Universidad de Stony Brook de Nueva York comprobó (en un censo realizado 10 años después de su última visita a la zona) que las poblaciones de pingüinos de Adelia -Pygoscelis adeliae- que se instalaron ahí se pudieron mantener estables a lo largo de la última década”.
“Según los investigadores, embarcados a bordo del Arctic Sunrise estos datos obtenidos refuerzan la necesidad urgente de proteger y preservar el mar de Weddell mientras pueda conservar un ecosistema intacto, algo que podría lograrse mediante la ratificación internacional de un Tratado Global de los Océanos”.
La Antártica calentándose
“Ahora los datos del Centro Nacional de Datos de Hielo Marino señalan que este año el hielo marino antártico alcanzará la extensión más baja registrada por satélite en su historia. Las mediciones preliminares muestran que el hielo marino alrededor del continente ya superó el récord mínimo anterior de marzo de 2017 (de 2,1 millones de kilómetros cuadrados) cayendo a 1,98 millones de kilómetros cuadrados el pasado domingo 20 de febrero.
“Es aterrador presenciar cómo se derrite este océano. Las consecuencias de estos cambios se extienden a todo el planeta, afectando las redes alimentarias marinas de todo el mundo. A la vez, en 2020, vimos que el Artico alcanzaba su segunda extensión de hielo marino más baja registrada, ahora necesitamos una red global de santuarios oceánicos viendo la crisis que está ocurriendo en ambos polos. Cada ser humano en la tierra depende de unos océanos saludables para sobrevivir; esta es una clara advertencia de que debemos protegerlos para siempre”, declaró Laura Meller, responsable de la campaña de Océanos de Greenpeace nórdico a bordo del Arctic Sunrise desde la Antártida.
“Durante las últimas dos décadas, la región tuvo variaciones extremas en la extensión de su hielo marino, pero la caída de este año no tiene precedentes desde que comenzaron las mediciones”.
Pérdida de masa
“Mientras los científicos investigan la dinámica entre el calentamiento global y las tendencias del hielo marino, el colapso climático es evidente en la región: algunas de las partes de la Antártica se están calentando más rápido que en cualquier otro lugar del planeta”.
“El casquete polar de la Antártica está perdiendo masa tres veces más rápido ahora que en la década de 1990 y contribuye al aumento del nivel del mar. Además, que las temperaturas suban tan rápido ya está causado un cambio profundo en la distribución y concentración del krill, que es el alimento clave de todas las especies que habitan en la Antártica”.
Es urgente un
Tratado Global
Unos océanos sanos son fundamentales para reducir los impactos de la emergencia climática, ya que ayudan a mantener el carbono almacenado de manera segura fuera de la atmósfera y de las emisiones globales. La comunidad científica señala que proteger al menos el 30% de los océanos con una red de santuarios es clave para permitir que los ecosistemas marinos desarrollen resiliencia para resistir mejor los rápidos cambios climáticos”.
“Desde Greenpeace a nivel mundial la campaña para pedir un Tratado Global de los Océanos continúa su trabajo incansable a bordo del Arctic Sunrise para generar presión social de cara a marzo”.