Primer día de clases normales en medio de la pandemia puso a prueba los protocolos
- Pese a que se terminaron los aforos en salas y pasillos, la obligación de usar mascarilla y el habitual uso de alcohol gel y lavado de manos, fueron algunas de las obligaciones que cumplieron los niños en su primer día.
Con el desafío de retomar el sistema de aprendizaje que se vio modificado por la pandemia, los estudiantes de la Región de Magallanes retomaron masivamente a las salas para el primer día de clases. 32 mil estudiantes forman la matrícula en toda la región, mientras que en la Corporación Municipal de Punta Arenas, cifraron en un 71,1% la asistencia de los 8.021 anotados en el sistema público.
La principal adecuación será al nuevo protocolo sanitario fijado por la Seremi de Salud, en la que se eliminan los aforos, pero se mantendrá la obligación del uso del alcohol gel, el lavado de manos frecuente y el permanente uso de la mascarilla. Pero además, cada niño o niña, antes de entrar al colegio, tiene que controlar su temperatura y mantener una distancia con sus otros compañeros, aunque a la hora del recreo esto último sea imposible de evitar. Tras dos años de verse por pantallas, ahora están todos reunidos en la misma sala.
Marco Barría cursa séptimo básico A en la Escuela Juan Williams. “Un poco raro el nuevo método, porque andar con la mascarilla cansa un poco, sobre todo cuando hace calor. El año pasado alcancé a venir unos días, sólo que ahora es con más aforo en la escuela”. Reconoce que no tuvo dificultades para aprender en los dos años anteriores, a pesar de las dificultades, “me adapté altiro a lo online, pero prefiero estar en la escuela, para encontrarme con los amigos. Participo además en fútbol”.
Catalina Antonella Mansilla Cayún, del quinto básico A, tuvo que cortar su etapa escolar apenas iniciada, dado que apenas comenzó tercero básico, tuvo que encerrarse y adaptarse a otro sistema. “Antes no me gustaba venir al colegio, porque me levantaba muy temprano y cuando empezamos las clases online, me dieron ganas de volver. Fue una experiencia muy genial regresar, porque podemos ver a nuestros compañeros y trabajar en grupo. El año pasado (se refiere a 2020, lo que da una muestra de cómo afectó el sentido del tiempo a los estudiantes) entré a tercero y empezó la pandemia”. Y contrario a lo que manifestaron, sobre todo, las autoridades de educación, que reiteraban sobre los aprendizajes perdidos, la estudiante siente que las clases online le ayudaron a concentrarse mejor y a estar más atenta. “Detrás de una pantalla pude hacer mis clases más tranquila. Mi promedio era más o menos, y con las clases online fui mejorando”, reconoció Catalina Mansilla, que además de las clases, practica taekwondo en una academia.