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“Era él o yo”, declaró ante los jueces mujer acusada de homicidio de su pareja

Sábado 19 de Marzo del 2022

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En el hecho de sangre ocurrido en 2019 además resultó herido grave un amigo de la víctima fatal. Fiscal solicita dos penas: una de 13 y otra de 7 años, por ambos delitos, respectivamente.

En el Tribunal Oral en lo Penal de Punta Arenas comenzaron a ventilarse ayer los hechos que envolvieron el crimen del trabajador Andrés Navarro Leiva, en agosto de 2019, y donde además resultó herido grave un amigo.

La única acusada es Bárbara Lissette Moreira Parra, para quien el fiscal Fernando Dobson solicita dos penas. Una de 13 y otra de 7 años, por ambos delitos, respectivamente.

“No quise hacerlo”

Al inicio del juicio la acusada decidió declarar y entregar su versión de lo sucedido hace casi tres años.

“No quise hacerlo”, indicó Bárbara a los jueces, “pero era él o era yo, sino la que habría estado muerta ahora sería yo”, en relación al llamado crimen del sector Río de la Mano.

El hecho de sangre se gestó poco antes de las 2,35 horas del domingo 4 de agosto de 2019, al interior de una vivienda ubicada en pasaje Américo Contardi Nº210, donde la mujer estuvo momentos antes compartiendo con las víctimas, Amador Tapia Hernández y Andrés Navarro Leiva, este último con quien mantenía una relación sentimental informal.

Al ingresar a la casa va a la cocina donde toma un cuchillo y se dirige al dormitorio donde se encontraba la víctima, Andrés Navarro Leiva, a quien le propina seis estocadas en hombro, pecho, abdomen, mano derecha y pierna izquierda.

De ahí la acusada se dirige a la cama en que dormía Amador Tapia Hernández, a quien le inflige una puñalada en la espalda, para luego herirlo con el cuchillo en el cuello y rostro.

La agresora se va de la casa dejando a ambas víctimas agónicas y desangrándose. A raíz de esto Amador Tapia Hernández resultó con varias heridas graves, que de no ser atendido a tiempo le hubiese costado la vida.

Andrés Navarro Leiva en tanto no corrió la misma suerte ya que las heridas penetrantes le causaron la muerte.

La teoría del defensor, Marco Ibacache, es la de la legítima defensa por parte de su clienta, quien sólo se defendió de la agresión que le habría propinado previamente el hombre que posteriormente ella terminó apuñalando.

La acusada registra una condena de 5 años por homicidio frustrado, pena que cumplió en libertad. Y el día de los hechos ella tenía que estar en la casa porque estaba sometida a un arresto domiciliario nocturno, por otra causa.

El juicio oral tiene previsto que se extienda por 4 días, tiempo durante el cual la Fiscalía llamaría a declarar a 19 testigos y 6 peritos.

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