“No hay que ponerse a dieta estricta, hay que aprender a cambiar los hábitos alimenticios”

Gloria Aguila Calisto: “Tenemos que aprender a ver nuestra
alimentación como un acto de amor con nosotros mismos”.

Advierte que “exponerse de repente a un tratamiento que no tiene esa base científica puede producir más problemas a la larga, como el de los círculos viciosos de las dietas. Porque en el fono no es que uno se ponga a una dieta estricta por un tiempo, sino que uno tiene que aprender a cambiar los hábitos alimenticios”

Edmundo Rosinelli

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Podría decirse que el coronavirus trajo aparejada otra pandemia: la obesidad. El encierro en casa y el poco ejercicio hicieron de las suyas en los últimos dos años.

En este ámbito, hoy cobra mucha relevancia el trabajo y consejo de las nutricionistas, que justamente ayer celebraron el Día Nacional del Nutricionista, conmemoración que recuerda la creación de la primera escuela de dietistas del país, en 1939.

A nivel local la presidenta del Colegio de Nutricionistas es la magallánica Gloria Monserrat Aguila Calisto, 39 años, quien realizó sus estudios básicos en la Escuela Patagonia; los medios en el Liceo María Auxiliadora y los profesionales en la Universidad del Mar.

Además ostenta un diplomado de alimentos funcionales de la Universidad de Chile; un diplomado de gestión de seguridad alimentaria de la Universidad Católica y tiene formación como auditora de sistemas de gestión de calidad,

Actualmente ejerce su labor profesional en la Junaeb. Y hasta el jueves trabajó para la Universidad de Magallanes y la Universidad Bernardo O’Higgins de Santiago.

“Como Colegio Nacional estamos trabajando en varias líneas, que tienen que ver principalmente con el reconocimiento o inclusión de nuestra profesión en el Código Sanitario, ya que esto nos va a permitir regular los límites y el campo de acción que tenemos dentro del trabajo”, es lo primero que destacó en conversación con La Prensa Austral.

“Me refiero a que estos nos va a permitir poner límites a la gente que está hablando o entregando planes de alimentación, y que no tienen la formación en el área”.

“Lamentablemente de nutrición todo el mundo sabe, pero la información que la gente tiene no necesariamente se cruza con estudios que lo avalen o con una formación profesión detrás”.

Obesidad

Sobre la obesidad, la profesional dijo que hoy es predominante y en tal sentido todo el mundo quiere bajar de peso, pero muchas veces recurre a gente que  no siempre tiene la preparación.

“Hay muchas personas que ofrecen planes de alimentación o de intervenciones que no necesariamente se sustentan sobre una base científica, o de cómo funciona el organismo y los campos metabólicos de nuestro organismo, que todo está perfectamente organizado”.

Entonces, advierte, “exponerse de repente a un tratamiento que no tiene esa base científica puede producir más problemas a la larga, como el de los círculos viciosos de las dietas. Porque en el fondo no es que uno se ponga a una dieta estricta por un tiempo, sino que uno tiene que aprender a cambiar los hábitos alimenticios”.

Cambio de vida

Lo que en el fondo plantea Gloria Aguila es un cambio de vida. Aprender a ver la alimentación “como un acto de amor con nosotros mismos, con la gente que tenemos alrededor, con nuestros hijos, nuestras familias. En el fondo los alimentos son fundamentales para que nosotros podamos vivir, para que podamos cumplir nuestras funciones, para que nuestros niños puedan tener mejor rendimiento en el colegio, para que su desarrollo sea el óptimo”.

“Yo, como familia, amo tanto a mis hijos que voy a entregarles alimentos que le van a ayudar a que su desarrollo sea de la mejor forma posible. Ese es el cambio que necesitamos hacer. Ir más allá de lo que significa el peso”.

También hay personas que visiblemente se ve que podrían tener problemas de sobrepeso, o están obesos, “pero si uno hiciera un análisis bioquímico podría darse cuenta que tal vez la persona tiene una serie de deficiencias en la parte de micronutrientes. Pudiera sufrir anemia u otro problema que le están generando otros problemas de salud”.

De ahí la importancia que le atribuye a ver la comida como un aliado para nuestro desarrollo, para la forma en que nos vamos desarrollando en las actividades del día a día.

Finalmente destacó que a nivel local el Colegio ha ido aumentando el numero de nutricionistas que se han ido incorporando al organismo que las representa.