Con la participación de 33 colegios se retomaron los desfiles escolares
El tradicional desfile escolar que conmemora a las Glorias Navales marcó el retorno de estos masivos eventos, después de la pandemia. A pesar del frío húmedo que se vivía frente al monumento a Arturo Prat, en Avenida Colón con Quillota, numerosas familias se acercaron hasta el sector para ver el paso de las delegaciones estudiantiles. Finalmente, 33 establecimientos de Punta Arenas, y 2.758 estudiantes, tanto de enseñanza básica como de media, marcharon bajo los sones de la banda del Instituto Don Bosco y posteriormente, de la banda de la Tercera Zona Naval.
Un momento especial para el suboficial de Infante de Marina Rodrigo Rivera, músico mayor de la banda insignia de la Tercera Zona Naval, quien este año pone fin a sus actividades al mando de los músicos, después de dos de los cinco años que lleva en la región. “La idea de la institución es retomar todas las tradiciones de Chile, como este desfile de los niños. Durante la pandemia hicimos estudio individual, para no perder la práctica y los ensayos los retomamos a principios de año, con aforos, puertas y ventanas abiertas… y abrigados”.
Para el capitán de fragata Jorge Peralta Fuenzalida, segundo comandante de la Base Naval de Punta Arenas, “este es un desfile masivo después de la pandemia y lo bueno de esto es que estamos volviendo a realizar todas las actividades de conmemoración del 21 de mayo y lo más importante, es que están participando los colegios, recordando la gesta heroica del comandante Prat y su tripulación, que representa los valores patrios y de la familia, que son los que queremos transmitir a los jóvenes, y a la unidad, que es lo que caracteriza a Prat”.
El espíritu juvenil fue destacado en la alocución, a cargo del capitán de Fragata infante de Marina Oscar Negrete, comandante del Destacamento de Infantería de Marina Cochrane, que recordó la participación de los niños héroes en los combates de Iquique y Punta Gruesa, como José Emilio Amigo, grumete de la Esmeralda con sólo 10 años que debió atender a la tripulación, José Baltazar Briceño Cordero, también grumete, de 14 años en ese entonces, Gregorio Araya Aburto, que falleció en combate con apenas 16 años, Arturo Olid Araya, que con 13 años se enroló para embarcarse en la goleta Covadonga, y que tras sobrevivir, hizo una destacada carrera en la política nacional. Finalmente, se destacó el caso de Gaspar Cabrales Besodilla, que con apenas 15 años fue destinado a cumplir labor de tambor y corneta de órdenes, y que no pudo transmitir el mensaje de abordaje de Prat, pues cayó muerto en el momento previo al salto del héroe naval.
Tras el paso de las delegaciones escolares, el contraalmirante Fernando Borcoski valoró la participación de los establecimientos que aceptaron la invitación de la Armada: “Muy contentos por poder retomar esta tradición tan importante, que la juventud conmemore las Glorias Navales, hubo una participación mucho mayor a la que esperábamos, teníamos un poco de temor, por el clima. Esta era una de las actividad más importantes y teníamos muchas ganas de realizarla y la central es el desfile de este sábado 21 de mayo a las 11 de la mañana en esta misma plaza, retomando las actividades después de dos años de receso”.