Hombre que mató a su esposa y dos hijos cumplió 20 años preso y ahora pide su libertad condicional
A fines de abril de 2002 un horrendo hecho de sangre conmocionó a los habitantes de la apacible localidad de Cerro Sombrero, en Tierra del Fuego. Raúl Enrique Garrido Silva, de entonces 39 años, asesinó a su esposa, Claudia Jeanette Ruiz Flores, de 21 años, y a sus hijos Enrique Armando, de 3; y Javier Alberto, de un año y 9 meses. Según la versión policial, el victimario dejó una carta sobre el cuerpo de su cónyuge, donde atribuye el asesinato a sus celos, ya que se sentía engañado por ésta. Vecinos dieron cuenta que el matrimonio atravesaba por una fuerte crisis e, incluso, la mujer había solicitado una semana antes alojamiento en casa de éstos, ya que el marido la había amenazado de muerte. El autor había sido distinguido por la comunidad como vecino ejemplar.
Veinte años después, el protagonista de este bestial parricidio, que cumple su condena de presidio perpetuo simple en la cárcel de Punta Arenas, solicitó el beneficio de la libertad condicional, a través del abogado penitenciario, vía un recurso de amparo.
Garrido Silva había postulado al beneficio en la sesión de fecha 13 y 14 de abril pasado de la Comisión de Libertad Condicional, sin embargo los ministros y jueces rechazaron tal pretensión, argumentando que si bien tiene muy buenos antecedentes en cuanto a su comportamiento interno, y el cumplimiento de otra serie de exigencias, “es claro y preciso señalar que el postulante debe tener conciencia de la gravedad del delito, del mal causado y su rechazo explícito a tales delitos, cuestión que en este caso, ninguna de las condiciones se presenta”. Los jueces aludieron al informe que da cuenta del patrón de orientación pro criminal del condenado, asociado a la minimización y justificación de la conducta infractora, con potencial criminológico con deficientes habilidades de resolución de conflictos; personalidad orientada a la psicopatía. No se observan cambios”.
Otras solicitudes
Este presidiario es uno de los 35 internos que durante los últimos días ha recurrido a la Corte de Apelaciones procurando revertir la decisión de la Comisión de Libertad Condicional que rechazó sus postulaciones.
Entre ellos hay otros cuatro homicidas. Se trata de José Harry Saavedra, Kevin Boitano Trujillo, Iván Ojeda Carrera y Jaime Saavedra Calderón, todos condenados a la pena de 10 años y un día de presidio.
También figura el caso del recluso Juan Carlos Agüero Paredes, condenado por secuestro y abuso sexual, a la pena de 8 años de cárcel.
Igualmente hay 11 condenados por violación y abuso sexual, y uno por femicidio frustrado, que corresponde a Alex Vidal Gómez, sentenciado a 10 años de cárcel.
En cuanto a la extensión de la pena, el interno Alex Oyarzo Quintullanca, condenado por asalto, cumple su pena el 8 de agosto de 2028.