En 15 días más se conocerá fallo sobre litigio por propiedad de sede del Club Catef de Porvenir
Cables a la vista, pintura sin renovar, baños de clientes del restaurante cerrados y un estado bastante deficiente del inmueble, observó el juez de Porvenir, Pablo Aceituno y los abogados que participaron de la inspección dispuesta por el magistrado fueguino a la casa del Club Catef de Porvenir, como parte del litigio entre esa institución social y el concesionario de su sede social, Juan Carlos Oyarzún, quien tras décadas de usar el inmueble y sin informar a la entidad que se lo cedió, solicitó al Estado la propiedad de la vivienda.
El presidente de Catef, Juan Carlos Kalazich, definió al documento de solicitud “decreto ladrón, porque permite que gente sin escrúpulos se adueñe de bienes que tienen dueño y que se encuentran inscritos en los conservadores del país”.
Recordó que el Club Catef fue pionero en agrupar a gente de la comunidad en torno al deporte desde 1979, ganando campeonatos y que compraron su sede en calle Padre Mario Zavattaro 094 en 1985, luego de reunir dinero por años con aportes de los trabajadores del frigorífico Catef (luego Sacor). Añadió que en 2002 se le entregó en concesión a Oyarzún Cano, periodo en que los socios concurrían al club de manera periódica y que luego, los pagos del concesionario dejaron de ser continuos, para en seguida buscar testigos falsos y declarar mentirosamente que se le entregó la sede a modo gratuito.
Aunque la Seremi de Bienes Nacionales falló la petición de Oyarzún a favor del Club Catef, envió los antecedentes al Juzgado de Porvenir para que dirima la controversia, de acuerdo al procedimiento legal establecido.
El dirigente terminó esperando una resolución favorable a Catef del magistrado fueguino, cuyo fallo se conocerá dentro de 15 días.