Fiscalía presentó acusación por crimen de desabollador: pide penas de 18 y 12 años de cárcel para hijos

El feroz asesinato que estremeció a la comunidad quedó al descubierto el 10 de febrero de 2018, luego que el cuerpo de la víctima fuera hallado con múltiples estocadas, en el sector villa Generosa, al surponiente de Punta Arenas.

La Fiscalía de Punta Arenas cerró la investigación respecto de uno de los hechos de sangre más violentos y estremecedores de los últimos años, que derivó en la detención de la esposa y dos de los hijos de la víctima, Omar Díaz Barría.

El delito de parricidio fue consumado el 5 de febrero de 2018, al interior de la propiedad de Díaz Barría, en calle Miraflores. El asesinato quedó al descubierto recién 5 días después, cuando el cuerpo del  jefe de hogar fue hallado en la parcela 231, correspondiente al sector villa Generosa, al surponiente de la ciudad.

Por esos días existía una denuncia por presunta desgracia, interpuesta por la misma esposa Margarita Pérez Muñoz.

La versión de la familia fue que había salido a comprar cigarrillos a un almacén cercano y no volvió más.

Transcurridos dos años y 6 meses, la PDI consiguió aclarar el crimen.

El 25 de agosto de 2020 fue formalizada la esposa, Margarita Pérez Muñoz y los hijos del matrimonio, Omar Ariel y Constanza Isabel Díaz Pérez, por parricidio quedando todos en prisión.

Sin embargo, cinco meses después se rompió el “pacto de silencio”. Madre e hija se allanaron a colaborar con la investigación y la declaración que entregaron les permitió abandonar la cárcel y quedar con arresto domiciliario nocturno, medida que mantienen actualmente.

Sólo se mantiene en la cárcel el hijo, Omar Ariel Díaz Pérez, quien se inculpó del asesinato de su padre.

De acuerdo a lo establecido por el fiscal Fernando Dobson, la víctima, Omar Díaz, se encontraba ebrio y protagonizó un violento episodio de violencia intrafamiliar. Insultó y empujó a la madre. El hijo salió en defensa de su mamá y se enfrentó a golpes con su padre.

En ese momento la madre le gritó a la hija (Constanza) que estaba en el segundo piso que bajara. Ahí ella subió a ocultarse y a proteger a la nieta.

“Omar Díaz fue agredido por el hijo, con un arma cortopunzante, en diferentes partes del cuerpo. Y mientras la víctima se defendía cayó al suelo, pero aún con vida. El imputado le asestó múltiples estocadas en la espalda y otras partes del cuerpo. Fueron no menos de 85 heridas que le costaron la vida”, relató en su oportunidad el fiscal.

Posteriormente el hijo y la madre hicieron desaparecer el cuerpo. Mientras Constanza limpió la sangre y todo vestigio de la agresión. Su hermano, en tanto, procedió a trasladar, a quemar y desmembrar el cuerpo de su padre para finalmente reubicar los restos en el sector del pasaje Ñandú, villa Generosa.

Acusación

La acusación presentada por el fiscal Dobson, que corresponde a la etapa previa al juicio oral, deja afuera a la viuda Margarita Pérez, atribuyendo participación directa a los hijos Omar y Constanza Díaz Pérez, en el delito de parricidio, solicitando penas de 18 y 12 años respectivamente.

Defensa

En una entrevista anterior, el abogado defensor, Juan Carlos Rebolledo, afirmó que su representado Omar Díaz Pérez asume su participación en los hechos investigados, entendiendo que en esos momentos no había otra alternativa, y que tarde o temprano algo así sucedería, como también que pudo ser la madre la víctima fatal por las constantes agresiones del jefe de familia.

Añadió que es un hecho precedido por actos de violencia intrafamiliar de larga data, donde la principal víctima era la madre. Ello unido a un consumo problemático de alcohol de parte del padre.