Con llamado a “guardar la espada” de la violencia se celebró el Domingo de Ramos

Recordando el momento en que Jesús es tomado prisionero y le pide a uno de sus seguidores “guardar la espada” para evitar la violencia, el obispo diocesano Oscar Blanco Martínez entregó ayer un mensaje de paz y amor a la comunidad magallánica durante la misa de Domingo de Ramos.

Con esta ceremonia la comunidad católica entró de lleno a la Semana Santa, celebración a la cual la autoridad eclesiástica invitó “a vivirla juntos, a caminar juntos este tiempo para que el Señor pueda acompañarnos en la misión que él nos ha encomendado”.

En su homilía y tras la lectura del pasaje donde Jesús es tomado prisionero luego de ser traicionado, iniciando así la pasión que lo llevara a la resurrección, Blanco Martínez destacó que el mensaje de ese momento es que la violencia no se combate con más violencia, sino con el amor. “Quien a hierro mata a hierro muere, por eso Jesús le pidió a su seguidor guardar la espada. Y ese mensaje es el que hoy también debemos recibir nosotros, guardar la espada y dejarla en su lugar ante los problemas, las ofensas, y el maltrato, y responder con el espíritu de Jesús”.

Asimismo, el obispo dijo que durante 40 días el pueblo cristiano se ha estado preparando para vivir el “gran acontecimiento de la Semana Santa, el misterio pascual de Jesús, pasión, muerte y resurrección. Esta preparación la iniciamos allá por el Miércoles de Cenizas, que recordaba convertir el corazón y creer en la nueva noticia”.

Agregó que ese camino, tal como lo ha dicho el Papa Francisco, es  más favorable para la renovación personal y comunitaria, que conduce hacia la Pascua de Jesucristo, muerto y resucitado. “Por esa razón quiero invitar a toda la comunidad cristiana que peregrina en la Región de Magallanes, en Natales, Porvenir, Puerto Williams, Sombrero y todas las comunidades, para que entremos juntos a Jerusalén para vivir el Domingo de Ramos con la esperanza de los cristianos, para que nos acerquemos a la mesa del Señor el Jueves Santo en la tarde para elevar nuestro compromiso de amor”. 

Agregó, que la invitación también es para participar junto a todas las parroquias de la región en el Vía Crucis que recuerda la pasión, “y luego prepararnos junto a María para la resurrección”.

En la ceremonia de ayer en la Iglesia Catedral, además de la entrega de ramos a la comunidad, también se recordó a una decena de personas fallecidas, entre ellas Sylvia Vera Pérez y Jaime Gutiérrez Varillas.