Mario Varillas murió esperando indemnización por torturas y ahora la justicia falló a su favor

Hace cinco años Mario Varillas Cusevich presentó una demanda de perjuicios en contra del Estado por 200 millones de pesos, como víctima de torturas y vejámenes en dictadura.

El escrito fue patrocinado por el abogado Alejandro Domic Mihovilovic, pero, en diciembre de 2019, el 8º Juzgado Civil de Santiago lo rechazó aplicando la prescripción planteada por el fisco, a través del Consejo de Defensa del Estado.

Sin embargo, ahora, el 4 de abril de 2023, la Corte de Apelaciones de Santiago revocó la resolución de primera instancia y ordenó el pago de una indemnización, claro que rebajó el monto inicial a 50 millones de pesos.

Lamentablemente el demandante, Mario Varillas, falleció el 29 de noviembre de 2020 esperando este fallo a su favor.

Misión cumplida

“Para mí, es una satisfacción muy grande porque era el sueño de mi vida terminar esta causa con una buena sentencia y espero lo mismo con otras que tengo en trámite. En lo personal, es como decir: ‘Misión cumplida’”, dijo a El Magallanes, Alejandro Domic, abogado de Varillas.

Torturado

En la demanda, Mario Varillas declaró que, en septiembre de 1973, siendo empleado del Banco O’Higgins y presidente del Sindicato de Trabajadores de dicha institución, el día 17 de ese mes fue sacado violentamente, junto con otro compañero, por efectivos de la Fuerza Aérea de Chile en una operación comando con despliegue de efectivos y corte de tránsito.

Ambos fueron llevados a un lugar desconocido que posteriormente supieron que era el recinto Fach de Bahía Catalina, a tres kilómetros del centro de Punta Arenas. 

Las situaciones de torturas, tratos denigrantes se repitieron constantemente y luego de 3 meses fue puesto en libertad condicional. Lo obligaron a firmar un documento donde decía que había estado “voluntariamente a disposición de las Fuerzas Armadas” con todas las comodidades y sin consecuencia ninguna. 

Fue detenido a los 26 años de edad, pero las afecciones y dolores lo acompañaron toda la vida, hasta los 72 años, cuando falleció, producto de secuelas físicas.

La demanda consigna que “las torturas, maltratos, detenciones ilegales, vejaciones e indignidades que detalló someramente fueron y son absolutamente ilegales, arbitrarias y degradantes, y dan origen a la responsabilidad del Estado de Chile por el actuar de sus agentes, añadiendo que la condición de víctima de la represión política y violación de derechos humanos le fue reconocida por el estado y consta en el “Informe de la Comisión Nacional sobre Prisión Política y Tortura” en la “Nómina de Personas Reconocidas como Víctimas” bajo el N° 25.548”.

Mario fue detenido, encarcelado y torturado ilegal y arbitrariamente por agentes del Estado de Chile entre el 17 de septiembre y el 28 de diciembre de 1973.