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Más de 95 niños y jóvenes dan vida al Conservatorio de Música de la Umag

Jueves 27 de Abril del 2023

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  • El centro formativo tiene un plan de estudios que contempla clases instrumentales individuales una vez por semana y
    una clase grupal teórica, donde a los alumnos se les enseña a leer partituras y a reconocer auditivamente diferentes ritmos.

Son más de 95 niños y jóvenes los que participan del Conservatorio de Música de la Universidad de Magallanes, ubicado en pleno sector centro de Punta Arenas (Avenida Bulnes). Fue creado en 1989 con el fin de promover una formación musical en menores de edad de la Patagonia chilena y la difusión de música docta dentro de la comunidad regional.

Javier Covacevich Pérez, director del centro formativo de música de la Universidad de Magallanes, explicó que se encuentran trabajando con alumnos regulares que siguen la malla del Conservatorio, que tienen un plan de estudios que contempla clases instrumentales individuales una vez por semana y una clase grupal teórica, donde se les enseña a leer partituras, a reconocer auditivamente diferentes ritmos y alturas, etcétera.

“Y además de eso, tenemos algunos talleres grupales, por ejemplo, un taller de iniciación musical que es para niños hasta 11 años aproximadamente y otro es un taller de jazz que es más para adultos. En este momento solamente nos quedan cupos para el taller de jazz para contrabajo”, explicó el director.

Plan de revitalización

Según Covacevich, el Conservatorio está trabajando en un plan de revitalización que es financiado por el Ministerio de Educación, y la idea de ese proyecto es hacer que este espacio artístico musical reviva, ya que con la pandemia fue bastante afectado, disminuyendo las matrículas, haciendo que desde la institución se desarrollaran diferentes proyectos para que la comunidad se acerque al Conservatorio. 

“Ahora, por ejemplo, estamos haciendo un jardín comunitario. Hace dos fines de semanas hicimos un taller para plantar semillas, para hacer almácigos y la idea es que eso continúe durante todo el año para nuestros estudiantes y para otras personas, y así como ésa va a haber también otras actividades, por mencionar, talleres de creación musical, laboratorios de creación audiovisual en torno a la música docta. Varios encuentros, vamos a tener profesores visitantes, así que estamos tratando de nutrir nuestra cartelera, viajar también, por ejemplo a Puerto Natales, tocar en Porvenir y en otras comunas más pequeñas, como Laguna Blanca”, comentó.

Presencia en Instagram

“También hace poco tiempo acabamos de posicionarnos en Instagram y nos está sirviendo como medio de difusión, ya nos están empezando a contactar desde distintos espacios culturales para hacer alianzas”, indico el director.

En tanto, los alumnos que estudian violín u otro instrumento de cuerda, “participan en una orquesta, de corte infantil, y después tenemos también una orquesta preparatoria asociada al Conservatorio, siendo la idea que los músicos que destaquen puedan ingresar luego a la Orquesta Sinfónica de la Umag”, comentó Covacevich.

Programa de aproximación 

Además, la entidad está trabajando en un programa llamado “Aproximación interactiva a los saberes del Conservatorio”, que consiste en visitas guiadas a dicho establecimiento de estudiantes entre tercero y quinto básico. “Aún nos quedan cupos, por lo que cualquier escuela o colegio que desee participar se puede inscribir”, dijo Covacevich.

Las inscripciones se pueden hacer por correo a [email protected], pero cada colegio debe encargarse de la movilización.

La edad para aprender

Respecto de la matrícula, el director comentó que la edad va a depender un poco del tipo de actividad. “Esos talleres, que te mencionaba tienen edad específica, que se informa en cada convocatoria. Sin embargo, si uno quiere estudiar un instrumento, simplemente no hay ninguna edad tope. Hay gente que tiene más de 50 años de edad y ha entrado a estudiar un instrumento. Pero para clases de instrumento individual desde los 7 años en adelante”.

Respecto a los requisitos, los alumnos no tienen que tener conocimientos musicales previos, pero sí se hace como una suerte de prueba en la que se miden ciertas habilidades musicales, entre ellas -por ejemplo- la capacidad de reconocimiento auditivo, ya que la idea es ver si existe una base que indique si le va a ir bien en la parte teórica o no. 

“En algunos sistemas educacionales, se considera que la música y el aprendizaje instrumental es parte de la formación integral de una persona independiente, de si va a ser tu profesión o no. Ahora, obviamente es difícil implementarlo, porque son clases onerosas, no cualquier establecimiento lo puede hacer, pero de todas maneras nosotros pensamos que es importante que las personas se eduquen musicalmente, sin importar si más adelante será su carrera o no”, contextualizó.

Covacevich puntualiza que “sí necesitamos un compromiso, ya que cualquier persona que estudie un instrumento tiene que entender que a fin de cuentas es una responsabilidad, porque semana a semana hay que practicar para avanzar, porque aquí se da el contenido y después, hay que practicar por cuenta propia”.

Clases presenciales y cuerpo docente

“Tenemos clases en este momento de violín, viola, violonchelo, contrabajo, percusión, guitarra y piano, y además tenemos taller de iniciación musical y el taller de jazz lo vamos a empezar a implementar este año”, indicó Covacevich, remarcando que las clases son 100% presenciales.

El director del Conservatorio de Música de la Universidad de Magallanes expresa que “en las clases permanentes tenemos un cuerpo académico estable y también un cuerpo administrativo y que nos ayuda con la gestión. Tenemos a Ricardo Colima, en violín y viola, a Claudia Uribe en violín y viola inicial para niños y con la orquesta.

Infantil y preparatoria, a Nicolás Prieto, profesor de piano; a Nicolás Petrovich, que hace clases de teoría y armonía; a Gabriela Núñez que enseña guitarra y teoría musical; Víctor Díaz, piano y taller de jazz; Javier Covacevich en piano y teoría musical; Cristián López, que hace violonchelo; Pablo Villarroel, que hace contrabajo; y Sergio Ojeda, que hace percusión, esos son los profesores”.