Retrospectiva en Magallanes a propósito de los 50 años del Golpe de Estado

Muchísimo monopoliza en los medios de comunicación nacionales, lo que ocurre y transcurre en el centro del país. Si los santiaguinos se desplazan en un feriado largo al litoral o a donde puedan o se les ocurra, respecto del desarrollo de su Metro (a estas alturas el más extenso de Latinoamérica), de sus “tacos”, los “portonazos”, el atochamiento en sus hospitales, y todo lo que afecta a sus esforzados habitantes (la gran mayoría) y a los privilegiados (la gran minoría). De las regiones poco o nada se habla en el desarrollo y en el análisis del país y en particular en los medios que todavía llegan a la mayoría de los chilenos. Casi en la anécdota aparecemos, en el “suplemento” que significan, los programas tipo, “lugares que hablan”, que a estas alturas ha sido copiado hasta el hartazgo, mostrando la poca creatividad de los medios de comunicación masivos tradicionales (la Tv chilena), que repite y repite , piensa poco, es previsible y cansina.

En estos días, dichos medios (y los “escritos”, pero con mayor profundidad) han comenzado a poner en agenda, la próxima conmemoración de los 50 años del Golpe de Estado, que instauró una larga y cruenta dictadura militar. Muchos la llaman Dictadura Cívico-Militar, y claramente es una denominación que más habla de quienes colaboraron y dieron forma jurídica-administrativa a la post-dictadura, que es la que de alguna manera nos sigue gobernando, a través de una dictadura económica, donde 8 a 10 familias o grupos económicos, apadrinados o dejados actuar por el dictador, se transformaron en poderosísimos actores de la economía de Chile.

Los mismos dueños de las isapres, son dueños de los AFPS, de los pollos, los cerdos, los bancos, las financieras, las distribuidoras de combustibles, las universidades privadas, de los molinos, lecheras y de todo o casi todo lo que incide y determina nuestra vida diaria. 

Pero vamos por parte y un poco para atrás y, aprovechemos esta conmemoración para intentar hacer una retrospectiva, respecto del impacto que los gobiernos desde la mitad del siglo pasado (para poner en contexto al año 1973) hasta nuestros días actuales han tenido esencialmente con nuestra Región de Magallanes. Del resto de Chile que escriban otros.

Por ello, elijamos partir más o menos 25 a 30 antes del rompimiento de nuestro sistema democrático, con el bombardeo a La Moneda por parte de Pinochet, Carvajal y Leigh el 11 de Septiembre de 1973.

Iniciemos nuestro análisis general respecto del accionar e impacto que tuvo cada sucesivo gobierno o etapas de éstos para con nuestra región. Partamos en la década del 40 (30 años antes del gobierno de Salvador Allende). Desde 1938 a 1952 se sucedieron tres gobiernos del Partido Radical con Pedro Aguirre Cerda, Juan Antonio Ríos y Gabriel González Videla. 

Hicieron un verdadero esfuerzo, por sistematizar y reforzar el sistema educativo chileno, con el desarrollo de las escuelas industriales, comerciales y los politécnicos como paso previo en el desarrollo de la Universidad Técnica del Estado (1947 creada por el gobierno de González Videla), el surgimiento y desarrollo de la Corfo (creada por Aguirre Cerda en 1939) y con esta de la ENAP (1945), la Enami, Huachipato (1947), y un largo etcétera. Esto tuvo su expresión en la Región de Magallanes, a través del desarrollo de la Enap y la explotación del petróleo esencialmente en Tierra del Fuego, que vino a diversificar la matriz productiva de Magallanes, que hasta ese tiempo, era esencialmente, ganadería más el desarrollo propio, del movimiento de sus incipientes poblados y su Punta Arenas, bien situada en el paso interoceánico. 

En lo general entre los 50 y 60 con el gobierno de Carlos Ibáñez del Campo, se vio la consolidación de lo anterior, un número en crecimiento de su población, por las perspectivas de desarrollo que trajo la industria del petróleo, junto al establecimiento del Puerto Libre (1957), el desarrollo y canalización del río de las Minas y la construcción del Aeropuerto de Chabunco (que hoy lleva su nombre), vino definitivamente a conectar permanentemente a Magallanes con Chile.

Luego en la década de 1960 a 1970 la creación de la Universidad Técnica del Estado sede Punta Arenas, entre el mandato del Presidente Alessandri y el Presidente Frei Montalva, dio un nuevo brío a la formación de capital humano en Magallanes y para Magallanes. Los maestros-profesores, vinculados a la prestigiosa Escuela Industrial de aquella época (fundada en 1940), más los ingenieros llegados de muchos lados de Chile y el mundo a trabajar en el petróleo, a la incipiente Enap, constituyeron la base para enseñar y formar a los primeros profesionales, ingenieros mecánicos, eléctricos y químicos de la sede regional de la UTE Punta Arenas. 

El impacto, con pocos recursos, mucha creatividad, seriedad, método y mística de los años 60, hizo que la UTE fuera un gran centro formador de profesionales muy conectada con la realidad productiva de la región. Con poco se hizo mucho.

Continuaremos el próximo lunes