Las mascotas siguen a la espera de definiciones municipales

El disponer de un cementerio de mascotas es un tema pendiente que mantiene el municipio de Punta Arenas, lo que ha llevado a los concejales a plantear esta situación en varias oportunidades sin que hasta ahora haya algún grado de avance al respecto.

El edil José Becerra, recordó que de acuerdo con los registros en 2009 la cantidad de perros en las calles de la comuna, ya sea con dueños o en abandono, llegaban a los 12 mil. Cinco años después dicho número ya se empinaba sobre los 13 mil. Y aunque hoy no existe certeza sobre el actual número, recordó que en pandemia las esterilizaciones efectivas dentro de los programas municipales se redujeron en 90%.

Si bien hoy se observa una menor cantidad de perros en el centro de Punta Arenas, en relación a hace algunos años, no menos cierto -indican- es que la cantidad ha aumentado en poblaciones y en sectores periurbanos, razón por la cual plantean la necesidad de que el municipio, de la mano de las facultades y obligaciones que establece la ley, comiencen a implementar algunos planes.

Cementerio de mascotas

Una de las propuestas allegadas al municipio corresponde al concejal Germán Flores, quien ha insistido en la necesidad de instalar un cementerio municipal de mascotas.

Mencionó que el lugar que las mismas personas instalaron en el borde costero del km 15 sur ha crecido de tal manera que es la muestra más clara de la necesidad que existe de destinar un lugar para el descanso de los animales. “Hace algunos años, y hay que decirlo aunque suene cruel, cuando moría una mascota sus dueños la metían adentro de una bolsa y la tiraban a la basura o la lanzaban al mar. Era así, y eso hoy resulta impensado, porque existe mayor sensibilidad y conciencia si se quiere, y porque las mascotas han pasado a ser un integrante más en las familias. Por eso merecen un trato digno”.

Flores agrega que hace un tiempo a alguien se le ocurrió la idea de sepultar su mascota en el sector sur de Punta Arenas, “y hoy junto a ella deben haber cerca de 500 animales sepultados. Y eso sigue creciendo”.

Dijo que ahora sólo resta que el municipio asuma la iniciativa tendiente a encontrar un lugar y destinarlo a cementerio, y no hay que dejar pasar otro año hablando de lo mismo.

Clínica veterinaria

Por su parte, José Becerra ha planteado una y otra vez la necesidad de comenzar a implementar una clínica veterinaria municipal, principalmente pensando en atención primaria y de emergencia durante las 24 horas.

El año pasado a los programas que el municipio venía desplegando en materia de atención y, principalmente esterilización, ya sea a través del canil o de operativos en terreno, sumó la contratación de un servicio veterinario externo.

La adjudicación y posterior funcionamiento no estuvo exento de discusión, lo que llevó a no renovar el servicio (con otra licitación) al término de los 12 meses de contrato.

El principal impedimento planteado por el alcalde Claudio Radonich para no trabajar en la propuesta de clínica propia ha sido la falta de profesionales veterinarios y los altos costos que podría significar la implementación de este servicio. Sin embargo, Becerra ha insistido en que la implementación podría ser gradual, pero con una decisión efectiva por parte del municipio.

Crematorio municipal

Hace más de una década las antiguas administraciones municipales ya venían hablando de la posibilidad de instalar un crematorio para mascotas. No obstante, no ha habido avances en este tema.

“Se ha hablado de la normativa y más, pero al parecer un privado pasó de la intención a los hechos y pudo más que el municipio”, sostuvo el concejal Becerra en alusión al crematorio privado que funciona hace algunos meses en el sector norte de Punta Arenas.

Agregó que pese a la iniciativa de particulares, el municipio debe trabajar en una iniciativa que permita contar con un crematorio propio a disposición de la comunidad.