Desbaratan clandestino de alcoholes en pleno centro: atendía a 45 personas
Ayer, alrededor de las 7 de la mañana, un llamado por ruidos molestos movilizó a funcionarios de Seguridad Municipal de Punta Arenas hasta un domicilio ubicado en Ignacio Carrera Pinto 839, entre calles Magallanes y Lautaro Navarro, en pleno centro de la ciudad.
Se trataba de un local nocturno clandestino, desde cuyo interior se escuchaban gritos. Como el municipio no tiene atribuciones para ingresar sin una orden judicial correspondiente, hubo que esperar a que lentamente salieran algunas personas. Minutos después, cuando llegaban efectivos de Carabineros, se produjo una especie de estampida, con la salida de unas 45 personas desde aquella propiedad.
Ahí se pudo establecer que había personas lesionadas, las que declararon haber sido atacadas por los regentes del lugar, y que los asistentes fueron retenidos sin su consentimiento durante varios minutos.
El alcalde Claudio Radonich, confirmó que en esa dirección funcionaba un clandestino, en el que se cobraba entrada por el ingreso y se vendía alcohol. Planteó que las municipalidades deben contar con facultades para poder intervenir este tipo de recintos. “No podemos ingresar. Esto es como una casa particular a la que no puedes ingresar si no hay una orden judicial. En este caso, se deja un parte (municipal) y se escuchan ruidos pidiendo auxilio y en ese instante es cuando personal municipal ingresa y se informa también que hubo personas agredidas y que hubo cerca de 40 personas retenidas”, señaló el jefe comunal.
Trascendió que quienes estaban a cargo del local son dos extranjeros que serían hermanos, y que estarían involucrados con un local nocturno de calle Errázuriz, en el que semanas atrás fueron halladas cuatro mujeres escondidas bajo una barra al no tener residencia legal en el país.
La municipalidad solicitó una reunión con las autoridades de la Fiscalía, Carabineros y del Servicio de Impuestos Internos, porque en este caso aparecen varios eventuales delitos como secuestro y evasión de impuestos.
Agradeció a los funcionarios de Seguridad Municipal que enfrentaron esta situación. Dijo que junto a la Dirección de Obras Municipales se establecerá si la construcción ejecutada en el inmueble está o no autorizada.
Expuso que éste no es el único clandestino que funciona de manera permanente en la capital regional. Recalcó que el municipio no cuenta con las facultades legales para cerrarlos, pero que se harán todas las gestiones para combatir a estos locales que no cumplen con la normativa vigente y que además provocan riesgo para quienes acuden a ellos. Hizo un llamado a las familias a informar a sus hijos a no acudir a estos locales, porque son peligrosos para su integridad física. Asimismo, se contactarán con el dueño de la vivienda que arrienda el lugar para fines ilícitos.
Alejandro Tobar, director de Seguridad Municipal, declaró que en las afueras del local nocturno fueron instaladas tres cámaras de seguridad que advierten la presencia de quienes se acercan al lugar. De hecho, al llegar a las afueras del domicilio se percataron de que fue apagada la música. En el intertanto se escuchaban gritos y agresiones contra los asistentes que intentaban salir pero que se les impedía hacerlo por la presencia de fiscalizadores municipales. Transcurrieron varios minutos hasta que algunos lograron retirarse hasta que posteriormente, y de manera sorpresiva, fueron abiertas las puertas provocando la salida intempestiva de quienes se encontraban en el interior.
Tobar confirmó que al ingresar al local se pudo establecer que se trataba de un salón clandestino, con barra, mesa de alcohol y pista de baile. Explicó que 6 a 7 personas denunciaron haber sido agredidas en el lugar, hecho que alcanzó mayor gravedad ya que los asistentes fueron retenidos contra su voluntad.
Carabineros tomó declaraciones a los agredidos y realizó un patrullaje preventivo por si encontraba más denunciantes. Se evidenció que el local no cuenta con autorización municipal para funcionar.
Los supuestos regentes del establecimiento ilegal están identificados, pero hasta ayer no habían sido detenidos.
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