Recursos por $445 millones asume la salud pública por atender a las personas abandonadas en hospitales

En la soledad y el abandono, hoy son cuatro personas las que están internadas en el Hospital Clínico de Magallanes sin haber una razón médica que los mantenga obligatoriamente en ese lugar. Son personas que llegan un día por una situación concreta y terminan quedándose por meses e incluso años, en un centro que entrega los cuidados básicos, pero que está lejos de ser un hogar permanente. Incluso, hay algunos que fallecen durante la espera de que alguien pueda hacerse cargo de ellos.

Son muchas las razones por las cuales estas personas llegaron a vivir en el total y más absoluto abandono y es la red de salud pública la que debe asumir los costos. Se trata de los pacientes sociosanitarios, denominación utilizada  con los usuarios que ingresan a los hospitales debido a un cuadro clínico y que, tras haber sido dados de alta, no egresan porque no tienen dónde ir.

Los pacientes sociosanitarios presentan una doble condición de riesgo y dependencia: social y de cuidados sanitarios. El hecho de que se prolongue su estadía significa la ocupación de cama, y la imposibilidad de traspasar este recurso a otro tipo de pacientes que están en espera de hospitalización.

Lorena Andrade, jefa del Departamento de Participación Ciudadana y Trabajo Social del Hospital Clínico, señala que hay familias que no se hacen cargo de los cuidados de sus parientes o también están los casos de personas que definitivamente no cuentan con ninguna red de apoyo. Explica que “no todos han sido adultos mayores, pero sí la mayoría. Cuando hay pacientes que llevan mucho tiempo hospitalizados, sin criterio clínico para ello, son derivados a hospitales de baja complejidad, pues en esta región no hay otra opción porque no contamos con ninguna institución que pueda hacerse cargo de este tipo de pacientes”. 

La prioridad del Hospital Clínico de Magallanes es atender a toda la comunidad que requiera de una atención de salud, especialmente aquellos pacientes más complejos cuyas patologías no pueden ser resueltas en otros dispositivos asistenciales. En ese contexto, y ante la necesidad de disponibilidad de camas, los pacientes sociosanitarios son trasladados a hospitales de menor complejidad.

Respecto de estos pacientes abandonados, en dos casos se ha trabajado en su postulación al Establecimiento de Larga Estadía del Adulto Mayor (Eleam) Cristina Calderón. Pero otros dos casos no cumplen con criterios de ingreso a ningún dispositivo de la red, por lo que se encuentran a la espera de traslado a un hospital de baja complejidad.

Estas personas viven  en una constante vulneración de sus derechos, un problema invisibilizado. Si bien el Hospital Clínico provee todos los cuidados clínicos, no pueden salir al jardín, no pueden ver televisión, se controlan las visitas, tampoco pueden salir del recinto, ni realizar sus actividades darias. Es así como estadía tiene un costo emocional muy grande para los pacientes, una que está relacionada con la falta de visitas, de asistencia, la limitación de la interacción familiar. 

“El llamado es a las familias, a hacerse cargo de sus pacientes porque aquí la gente abandona con una facilidad increíble”, refuerza la profesional.