Falta de antiviral para pacientes de alto riesgo
En diciembre del año pasado, el Ministerio de Salud informó de la adquisición de tres mil dosis del antiviral recomendado por la Organización Mundial de la Salud contra el coronavirus para pacientes inmunosuprimidos.
En nuestro país, las estadísticas cifran en más de 50 mil las personas que se encuentran en la categoría de alto riesgo debido a la presencia de comorbilidades, las que tienen mayor posibilidad de sufrir complicaciones graves a la hora de contagiarse de Covid-19.
Según estudios que avalaron tal antiviral, se indica que éste logra que el sistema inmunológico tenga una mejor oportunidad de combatir el coronavirus, acortando su duración, siendo deseable que se aplique en pacientes de riesgo cuando se confirme su contagio.
Se asegura que reduce la carga viral de los contagiados y disminuye en un 89% las hospitalizaciones.
Por ello, es que el anuncio de la referida compra de tal medicamento fue celebrado como una buena política pública.
El Minsal dispuso que este fármaco fuera entregado gratuitamente en los servicios de urgencia públicos y privados del país, bajo ciertos requisitos detallados en una circular ad hoc emitida por dicha cartera.
Cinco agrupaciones que reúnen a pacientes con tales características hicieron ver recientemente que, no obstante en marzo pasado finalizó la etapa piloto para la entrega del antiviral, sólo se han repartido cien de las tres mil unidades adquiridas por el Minsal.
Estas entidades han recogido denuncias en tal sentido de diferentes ciudades del país y sus propios representantes han hecho el ejercicio de acudir a algunos hospitales donde se han encontrado con la sorpresa que los funcionarios desconocen de la existencia de este antiviral.
La situación es paradojal, pues, si bien ha quedado atrás el momento más crítico de la crisis sanitaria, en lo que va de este año casi dos mil personas han fallecido producto del Covid-19.
Ello hace que sea necesario que tales dosis sean repartidas y que los pacientes de alto riesgo puedan tener acceso a ellas.
Ante la denuncia, está claro que se tienen que mejorar los procedimientos de distribución y que las propias agrupaciones de pacientes de alto riesgo de Magallanes también deben solicitar que en los servicios de urgencia de los hospitales públicos y clínicas privadas tengan acceso a tales dosis. La vida de muchas de estas personas puede estar en riesgo si ello no sucede.