¿Cuándo pasa la micro?
La genialidad e imaginativa magallánica aprovechó estos días de nieve para esculpir una figura humana que ilustra las constantes esperas por el transporte público. Sentado en una banquilla, pareciera que no pasó nunca la micro y llegó a congelarse el susodicho. Como Argos, el perro de Ulises, que esperó sentado su retorno, en Magallanes la gente se congela esperando la vuelta de micros que parecen esfumarse de un momento a otro.