Implementarán programa de alimentación para niñas y niños durante el invierno

Camila Rubio, directora nacional de Junaeb, abordó los desafíos y logros de la entidad en Magallanes. Durante las vacaciones de invierno, la entidad implementará un programa de alimentación para niños y niñas que participan en diversas actividades, garantizando que reciban una nutrición adecuada incluso fuera del periodo escolar. 

La directora destaca la importancia que tiene el Programa de Alimentación Escolar, que ha evolucionado a lo largo de los 60 años de historia de la institución.  “Somos de los pocos países que garantizamos la alimentación desde los seis meses hasta la universidad”. Además, explicó que los alimentos proporcionados en las escuelas son cruciales para combatir la malnutrición por exceso y promover hábitos alimentarios  saludables desde una edad temprana. “La adecuada alimentación es fundamental para que un niño aprenda, comprenda y se concentre”, añadió.

Indices de obesidad

Uno de los grandes desafíos que enfrenta Junaeb es combatir los índices de obesidad infantil en la región. Aunque estos índices han mostrado una ligera disminución, Camila Rubio reconoció que siguen siendo preocupantes. “Hemos hecho esfuerzos significativos para mejorar la aceptabilidad de la alimentación, incorporando productos frescos de la agricultura y pesca local de Magallanes”, dijo. Estos cambios no sólo mejoran la calidad en los alimentos, sino que también apoyan a la economía local. 

En Magallanes, el programa de alimentación escolar benefició a más de 12 mil estudiantes, con la entrega de más de 33 mil raciones diarias en las escuelas y más de 1.700 raciones en jardines infantiles. La directora destacó la importancia de estos números, especialmente durante las vacaciones de invierno, donde se continúa con la entrega de alimentos a través de programas específicos como colonias escolares y actividades que se realizarán en el Liceo Sara Braun entre el 8 y 12 de julio.

La directora también remarcó la implementación de nuevos productos en los menús escolares, como parte de los esfuerzos por mejorar la calidad y variedad de las comidas. “Hemos incorporado productos frescos y saludables, y estamos incentivando el consumo de agua en lugar de bebidas azucaradas”, explicó. Estos cambios forman parte de una estrategia para fomentar hábitos alimentarios saludables desde el periodo escolar.

Junaeb no sólo se limita a la entrega de alimentos, sino que también incluye en un compromiso por ayudar a la seguridad laboral de las manipuladoras de alimentos. Camila Rubio menciona que se han realizado alianzas con la Superintendencia de Seguridad Social para poder garantizar la salud laboral de las manipuladoras de alimentos, quienes juegan un papel crucial en la ejecución del programa de alimentación. En la región son alrededor de 395 manipuladoras de alimentos las que imparten su labor en los distintos establecimientos.

A nivel nacional, la directora destacó la importancia de impulsar una ley de alimentación escolar que garantice la calidad y sostenibilidad de los programas alimentarios.  “Hemos establecido alianzas con instituciones como la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (Fao) para apoyar este proyecto de ley, que busca crear una política de alimentación escolar integral y sustentable”, dijo.

Esto incluye la participación de diversos actores, como estudiantes, profesores y dirigentes de la agricultura campesina, para asegurar un enfoque participativo y consensuado.

Finalmente, Camila Rubio destacó las metas que tiene Junaeb en el futuro, incluyendo la expansión de programas de alimentación durante las vacaciones y la mejora continua de la calidad de los alimentos.

“Esperamos seguir creciendo y apoyando más escuelas de invierno y verano, garantizando espacios seguros y nutritivos para nuestros niños”.