Exposición de obras en el arte del papel calado muestra los mundos interiores y la creatividad de sus autoras
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La muestra estará abierta al público a partir de esta tarde en el Taller & Galería Escarabajo, en calle O’Higgins Nº1013.
La palabra japonesa Komorebi se utiliza para describir los patrones de luz que aparece cuando los rayos de sol se filtran a través de las hojas de los árboles. Este concepto es el nombre del proyecto artístico de Pamela Seoane, artista visual, quien ha estado impartiendo talleres en el arte del papel calado y las obras de sus alumnas estarán exponiéndose este viernes, a partir de las 20 horas, en Taller & Galería Escarabajo, ubicado en O’Higgins Nº1013 segundo piso, lugar donde se impartieron estas clases y que alberga diversidad de disciplinas artísticas y manualidades.
Según relata Pamela, las primeras impresiones que se le vienen a la mente a la hora de pensar en este arte provienen de cuentos infantiles y libros pop up, en cuyas páginas aparecen figuras que se elevan del papel para llamar la atención de los lectores. “Esa fue la primera vez que vi el diseño de ingeniería en papeles y quedé pegada con eso”, comenta la artista.
No pensó que años más tarde una figura del barrio chino de Buenos Aires, donde estudió, le volvería a atrapar con sus colores y formas, lo que conllevó una mayor incursión e investigación en esta disciplina. “Recuerdo que vi una de las piezas caladas para su festividad de año nuevo. Y esa fue una de las primeras veces que vi una obra de ese tipo. Ahí ‘empecé a rayar’ y empecé a investigar ese tipo de obras en diferentes partes del mundo. Empecé a investigar el tema de los artistas y que era súper amplio todo el tema del arte en papel. Fue como que se me abrió un mundo de posibilidades”.
Y la exposición de sus alumnas reflejan fielmente la diversidad de opciones que ofrece esta técnica. Obras a modo de cuadros, mandalas, arte decorativo y conceptual se presentan sobre las repisas de la galería, exponiendo parte de los mundos interiores y creatividad de sus autoras. Entre las participantes que asistieron al taller está Karen Celis, Tihare Ortiz, Bárbara Hernández, Camila Torres, Elena Casas, Martina Pizarro, Teresa Alarcón, Isabel Peña y Karen Ulloa.
Una de las grandes ventajas de esta forma artística radica en la simpleza de los materiales, que lo vuelven accesible para gran número de personas. “El material que utilizas es económico. Es fácil de encontrar y necesitas solo papel y una tijera o un cúter y nada más. Hay mucha variedad de papeles con los que puedes trabajar, entonces hace que sea un arte barato y accesible”.
Por otro lado, ofrece una gama de posibilidades compositivas que se limitan a la creatividad de cada persona. “Puedes hacer muchísimas cosas, desde objetos de decoración hasta narrar una historia con un escenario de teatro de sombras o un cuento”, cierra Pamela Seone, la profesora del taller y artista de esta disciplina.