Mujeres del voluntariado y el trabajo solidario donde el Estado no llega

El aparato del Estado y los servicios públicos no siempre logran responder a las demandas sociales y llegar, en forma oportuna y eficiente, a los sectores poblacionales más económica y socialmente carentes o responder de manera adecuada en tiempo de crisis y catástrofes. 

Un ejemplo reciente de aquello fue la pandemia, en que diversos grupos sociales no sólo estuvieron en riesgo de contraer la enfermedad, sino que, por las distintas medidas adoptadas para evitar los contagios, quedaron aislados – como los adultos mayores, sobre todo los que estaban en condición de postrados-, sufrieron desmedro económico y pérdida de sus fuentes laborales o, por diversas razones, quedaron fuera del circuito de ayuda estatal. 

Donde el brazo del Estado no llega, en cada comunidad surgen personas que, en forma voluntaria, disponen de su tiempo y trabajo para acudir en apoyo de sectores que tienen carencias y necesidades que no hallan respuesta desde el aparato y estructura públicos.

En Magallanes, el voluntariado ha tenido expresión desde los inicios de la comunidad regional y expresa una apuesta por la participación y la solidaridad, como herramientas para construir comunidades más afables y más inclusivas. Es, en rigor, el reflejo de una conciencia social que se organiza para responder en forma eficiente a diversas demandas y que cree en el trabajo comunitario en pro del bien común. 

Diversos estudios en Chile y en el extranjero evidencian que los roles del género se reproducen en el voluntariado y que el porcentaje de mujeres que colaboran en distintas organizaciones sin fines de lucro supera al de los hombres  y que la mujer se presenta como sujeto visible de la acción voluntaria .

En esta edición de El Magallanes y en la publicación de mañana lunes en La Prensa Austral, se difundirán entrevistas que buscan poner el foco en el aspecto positivo de la participación de mujeres en distintos voluntariados, relevando el rol que han tenido dichas instituciones y el liderazgo femenino allí expresado. Así se destacará la importancia de promover el voluntariado y dar a conocer a distintas mujeres magallánicas que, en forma desinteresada, han optado por contribuir diariamente en forma anónima y sin fines de lucro al prójimo. 

Ello se condice con los lineamientos formulados por entidades tan relevantes como Naciones Unidas. Cabe indicar que el Objetivo de Desarrollo Sostenible número 5 pretende “lograr la igualdad de género y el empoderamiento de todas las mujeres y niñas”. Para la Onu, el voluntariado representa una excelente manera de empoderar a las mujeres, ya que les permite mostrar lo que son capaces de hacer, mientras adquieren nuevas habilidades y capacidades.

“El voluntariado también permite a las mujeres tener acceso a sectores tradicionalmente ocupados por los hombres, y asumir nuevas funciones, sobre todo como líderes y gerentes. Las mujeres voluntarias pueden servir como modelos a seguir, e inspirar a otras mujeres a seguir sus pasos”, argumenta la Onu.

Siguiendo tales lineamientos, este proyecto editorial buscará presentar a distintas mujeres voluntarias como ejemplos a emitar, a la vez de promover la acción voluntaria como herramienta para construir sociedades más igualitarias, inclusivas y solidarias.