Pescadores artesanales de la macrozona sur se manifiestan en alerta y exigen modificaciones a la Ley Lafkenche
Dirigentes pesqueros de las regiones de Los Lagos, Aysén y Magallanes se reunieron en Puerto Montt durante el mes de enero para analizar el escenario actual que enfrenta la actividad pesquera y acuícola. Ello, con la finalidad de coordinar acciones conjuntas para el año. La preocupación apunta principalmente a la escasa voluntad mostrada por el ejecutivo para modificar la Ley 20.249 (Lafkenche).
Los pescadores expresaron su descontento por lo que consideran una “escasa voluntad” del Poder Ejecutivo para abordar los cambios necesarios en esta ley. Aseguran que, a pesar de los esfuerzos de modificación presentados por el senador Fidel Espinoza y otros parlamentarios, el Ejecutivo aún no ha mostrado el compromiso suficiente para impulsar una reforma profunda y necesaria.
Según los dirigentes, la Ley Lafkenche ha causado una “discriminación e injusticia” al impulsar enfrentamientos entre los trabajadores del mar, las comunidades locales y las empresas productivas. Esta normativa, que originalmente buscaba otorgar a las comunidades mapuche un mayor control sobre las áreas costeras, ha sido objeto de fuertes críticas por parte de los pescadores artesanales, quienes consideran que la ley ha favorecido a grandes empresas, sin tener en cuenta las realidades sociales y económicas de los trabajadores del mar.
Otro punto crítico expresado por los pescadores artesanales es su desconfianza en los actuales procesos de participación convocados por la Subsecretaría de Pesca (Subpesca), tanto para modificar la ley de pesca como para crear una nueva ley de acuicultura. Los dirigentes denuncian que, a pesar de participar activamente en talleres y consultas, las decisiones finales siguen siendo impuestas por las autoridades sin atender a las necesidades reales del sector.
“Se muestra una cantidad de talleres y asistentes, pero al final lo que se pone en los proyectos de ley es lo que la autoridad quiere”, afirmaron, señalando que el proceso de participación no refleja la realidad de los trabajadores y comunidades del sur de Chile.
En su comunicado, los pescadores también manifestaron su rechazo a la intervención de ONGs ambientalistas, que según ellos buscan convertir el mar del sur de Chile en una “zona de sacrificio social”. Acusaron a estas organizaciones de promover la creación de grandes parques naturales y reservas marinas, sin tener en cuenta el impacto negativo sobre las actividades productivas, especialmente la pesca artesanal.
Los pescadores se mostraron particularmente preocupados por los planes de manejo y administración impulsados por el gobierno a través de la Corporación Nacional Forestal (Conaf) y el Sistema de Áreas de Protección (Sbap), los cuales consideran que amenazan la supervivencia de diversas actividades pesqueras y acuícolas en las regiones de Aysén y Magallanes. Entre las iniciativas más controvertidas se encuentran las propuestas para la creación de reservas como la de Guaitecas en Aysén y Kawésqar en Magallanes, que los pescadores temen que conduzcan a la “destrucción de las actividades productivas” en esas zonas.