Necrológicas

“Capitán América: Un Nuevo Mundo”: Ni tan nuevo

Domingo 16 de Febrero del 2025

Compartir esta noticia
164
Visitas

“Capitán América: Un Nuevo Mundo” es la última entrega de los estudios Marvel, una industria que nació del cómic de superhéroes y amplió su alcance al cine y las plataformas, “forrándose en dólares” y creando un universo cinematográfico propio, conocido como el MCU, donde cada película es una pieza de un puzzle. Si falta una, el espectador podría verse en serios problemas de comprensión.
Y si esto fuera poco, Marvel logró un milagro en el cine al hacer que la gente permaneciera en sus butacas hasta el final de los créditos, porque con Marvel nada termina donde termina.

En sus orígenes, cuando apenas se vislumbraba lo que llegaría a ser, entregó obras sueltas de gran factura como Iron Man (2008), la saga de los mutantes X-Men (2000), Spiderman (2002) y Capitán América: El primer Vengador (2011). Esta última es una cinta entrañable porque, además de tener una buena historia, había cariño por los personajes y recuperaba esa emoción clásica en la consagración del soldado raso Steve Rogers, que, del anonimato, se convierte en el salvador de la humanidad.

Harta agua ha pasado bajo el puente desde entonces, y eso se nota en Capitán América: Un Nuevo Mundo, donde el escudo multicolor que alguna vez llevó Steve Rogers se convierte en una especie de espada Excalibur del Rey Arturo, que anuncia quién debe llevar la corona de Capitán América. Ahora, ese honor recae en Sam Wilson, quien alguna vez fue Falcón en el universo Marvel y, por esas circunstancias de la vida, debe apoyar al nuevo presidente de los Estados Unidos, Thaddeus Ross. Este exmilitar, que alguna vez persiguió a su casi yerno, Hulk (para los cincuentones “El hombre increíble”), se ha ganado el odio de su hija, que no lo quiere ni ver en un retrato presidencial.

Con esa pena, Ross asume la presidencia y se enfrenta a un conflicto internacional: debe recuperar y proteger un mineral nuevo llamado Adamantium, que en otras manos sería más peligroso que el plutonio. Por eso, recurre a Capitán América, junto a su amigo Joaquín Torres, ahora el nuevo Falcón, quienes, como si fueran Batman y Robin de la competencia archirrival de Marvel, DC Comics, deben atrapar a un villano que ansía el mineral y que logra dominar las mentes con solo el ringtone de su celular.

Toda esta intriga se desarrolla combinando acción con algo de thriller político, pero no alcanza a tener mayor densidad, porque su preocupación principal es conectar personajes con el universo marveliano. Por eso, siempre hay referencias al pasado, algo del futuro, y por ahí, quizás, ir a la plataforma Disney para revisionar la miniserie Falcón y el soldado de invierno (2021), porque en ella se explican cosas mencionadas en la película.

Y quizás todo sea, al final de cuentas, una estrategia tramposa para no defraudar a los fans de Marvel y decirles a los no tan fans que “se pongan las pilas” para no quedarse tan atrás.

El guion es flojo, con pocas sorpresas. De hecho, el único “¡oooh!” del público en Punta Arenas no fue precisamente por la acción de la trama. Lo más rescatable es la presencia de Harrison Ford como Thaddeus Ross, un actor que, a estas alturas, no tiene problema en interpretar este tipo de papeles.

Capitán América: Un Nuevo Mundo lleva esos títulos que anuncian algo que se viene, pero que, al parecer, nunca llega. Solo resta quedarse hasta el final de los títulos para ver si la esperanza es lo último que se pierde. Y la mala noticia es que sí, también se pierde.

Pin It on Pinterest

Pin It on Pinterest