Denuncian que vecinos periurbanos recibieron agua potable en mal estado

Se señaló que al menos cinco personas terminaron en el hospital con fuertes dolores estomacales. Concejala Aguilar pidió al municipio investigar, mientras edil Francisco León habló de “negligencia criminal”.

Una investigación y la intervención de la autoridad sanitaria parecen ser los caminos que tendrá el municipio de Punta Arenas para determinar responsabilidades por el mal estado del agua potable entregada a los sectores periurbanos de villa Generosa y Monte Verde (alto y bajo).

El tema generó alarma durante las últimas horas luego que a lo menos cinco vecinos llegaran hasta el Hospital Clínico afectados de fuertes dolores estomacales que podrían estar asociados al consumo del vital elemento, entregado a estos sectores a través de un proyecto municipal y licitado a un tercero.

Lo anterior fue informado ayer por la concejala Verónica Aguilar, quien solicitó al alcalde Claudio Radonich que el municipio asuma las acciones correspondientes para determinar las responsabilidades por un agua que describió como “servida” y peligrosa para el consumo humano, pensando principalmente en los niños y en los adultos mayores.

La edil dijo que más que rabia la situación resulta penosa y peligrosa, pero que afortunadamente el personal municipal acudió rápido al requerimiento de los vecinos para constatar la efectividad de lo denunciado y retirar el agua.

Quien también se mostró indignado por esta situación fue el concejal Francisco León, para quien “esta es una negligencia criminal, porque entregar agua contaminada constituye para mí un delito”.

Por tal razón, señaló que el municipio tiene la obligación de pedir una investigación “lo más acuciosa posible y que los responsables de esta negligencia asuman su responsabilidad. Además, junto con la autoridad de Salud y la empresa involucrada velar para que se acentúen los controles de calidad del agua que se entrega a los vecinos”.

La visión fue compartida por el alcalde Claudio Radonich, quien sostuvo que tanto el agua como el aljibe son certificados, agregando que el agua que se entrega sale de los grifos.

Junto con coincidir en la necesidad de reunir antecedentes, dijo que hoy lo importante es también ver cómo han evolucionado las personas que fueron diagnosticadas con gastritis y subsanar la situación con los controles correspondientes, porque la distribución de agua debe continuar.