Derechos humanos de las personas mayores
Javiera Pérez Duvauchelle
y Paula Pérez Arias/El Mostrador
Desde 2011, el 15 de junio se conmemora el Día Mundial de Toma de Conciencia del Abuso y Maltrato en la Vejez, iniciativa que surge desde las Naciones Unidas y que busca generar espacios de reflexión y sensibilizar sobre la importancia de los derechos humanos de las personas mayores.
Chile ya es un país envejecido y el más envejecido de Latinoamérica. Es una realidad de la cual pareciera que consideramos relevante en ocasiones donde sólo priman postales dolorosas de noticias que dejan en evidencia la sistemática desprotección en el envejecer de muchas personas mayores en nuestro país. Creemos que vale la pena observar algunos eventos de los últimos 365 días y detenernos para recordar el femicidio de Norma Maldonado, mujer de 84 años asesinada y violada en Osorno el año pasado; el pacto suicida entre Nancy y Alex, matrimonio que decidió quitarse la vida dejando en manifiesto en una de sus cartas que “mi situación con Nancy cada día es peor por enfermedades mutuas. Además, no deseamos ser un lastre para nadie”; o la reciente condena por 10 años y un día de presidio a Matías Ortiz por violar a una mujer de 75 años que se encontraba en situación de dependencia severa producto de un accidente cerebrovascular. ¿Por qué ser persona mayor es un factor de riesgo en nuestra sociedad? Lo anterior, se condice con la sensación general que arrojan los resultados de Sexta Encuesta Nacional de Inclusión y Exclusión social de las Personas Mayores, de Senama y U. de Chile, que da cuenta de que un 72% cree que el país no se prepara nada o casi nada para enfrentar el envejecimiento poblacional.
El maltrato en las personas mayores es un problema social que existe todo el tiempo en nuestra sociedad, en distintos ámbitos y posiciones, trayendo diversas consecuencias, entre ellas, la negación y el menosprecio de la vejez. El estudio señalado da cuenta de que un 63% de las personas en Chile cree que las personas mayores de 60 años y más no son capaces de valerse por sí mismas. ¿Por qué surge esta idea tan errónea y exagerada? Cuando la realidad es totalmente lejana a esta creencia, ya que cerca de un 87% de este grupo etario es independiente en sus actividades de la vida diaria, es decir, envejece manteniendo su funcionalidad y autonomía. Y la respuesta es que sigue predominando la visión biologicista y asistencialista del envejecimiento y la vejez, personas como objetos de cuidado y no de derechos.
Por eso creemos firmemente que la Toma de Conciencia del Abuso y Maltrato en la Vejez debería ser los 365 días del año. La pandemia por Covid-19 y sus consecuencias, sumado esto a la propuesta constitucional que estamos viviendo como país, es una oportunidad inédita para reformular las instituciones públicas, especialmente en materia de envejecimiento y vejez. Sandra Huenchuan, especialista en envejecimiento de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), plantea que las instituciones debieran transitar a entidades de tipo rectoras frente a la nueva realidad demográfica, las cuales ponen el acento en la articulación como aspecto sustantivo a promover. El sello de este tipo de instituciones instala la articulación comunitaria como un aspecto fundamental para la sociedad, ya que incorpora la perspectiva de derechos humanos, de género y el enfoque territorial.
No basta con que el Estado ratifique y promocione una Convención Interamericana de Derechos, sino que urge ampliar la comprensión, el ejercicio y la promoción efectiva de los derechos y deberes de una forma más concreta, multidimensional, multidisciplinaria y en coordinación interinstitucional e intersectorial. Como reflexiona Huenchuan, urge una narrativa de los derechos humanos de las personas mayores menos centrada en la retórica y más enfocada en la práctica, donde concurran distintos actores y se escuchen nuevas voces (Cepal, 2022). Aquellas que hablen con la experiencia de los años y que posibiliten la realización de acciones transformadoras que acaben con las diversas formas de maltrato.
Sin ir más lejos, como Fundación Vejez Activa celebramos que los derechos de las personas mayores ingresarán al borrador de la nueva Carta Magna con un 83% de aprobación (uno de los plenos más votados), ratificando, en su artículo 1, la titularidad y plenos sujetos de derechos, dando especial énfasis a envejecer con dignidad, obtener prestaciones de seguridad social, mayor accesibilidad y participación y vivir libre de maltrato.
