Renovación de la política

La ciudadanía está convocada a participar en el plebiscito constitucional, restando apenas 20 días para aquello. De este resultado puede derivar otro proceso eleccionario para elegir a quienes conformen la eventual comisión constituyente.

A corto plazo, habrá primarias en algunas circunscripciones y comunas y también se acorta el tiempo para que muchos alcaldes, consejeros regionales y otras autoridades renuncien si quieren ser candidatos durante el 2021.

La agenda electoral de las postrimerías de este 2020 y de todo el 2021 está recargada de eventos en que la gente deberá acudir a las urnas para elegir a quienes los representarán en disímiles esferas de poder.

Pese a todos los cambios realizados a la ley electoral, todavía queda en manos de los partidos políticos la supremacía y las más ciertas posibilidades de imponer sus candidaturas.

Los independientes siguen estando en desventaja y, ciertamente, no se han abiertos espacios para la formación política ni para potenciar nuevos liderazgos. Idem respecto de la denominada sociedad civil.

Durante las semanas pasadas, vimos el intento de parlamentarios -azuzados por alcaldes- de levantar las inhabilidades para postularse, desoyendo la voz de la ciudadanía y buscando escenarios que le fueran más convenientes, desde todo punto de vista.

En su reciente decisión de no repostularse, la senadora DC Carolina Goic justificó este paso afirmando, precisamente, que la gente desea que haya renovación de rostros y que la denominada clase política no persista en perpetuarse en los cargos o jugar a las sillas musicales.

Más allá de si aquello es la razón ulterior de lo resuelto por Goic, sus dichos sirven para poner este tema nuevamente sobre la mesa y observar si habrá generosidad en los partidos para integrar a jóvenes, mujeres y representantes del mundo social en sus listas o si sólo buscarán sus nombres para rellenarlas y cumplir con los cupos establecidos.

Lamentablemente, se observa que la tendencia va en dicha dirección, que el círculo de poder no se abrirá y que serán los mismos “servidores públicos” los que estarán en las papeletas electorales de 2021.