Club Deportivo Extremo Austral vuelve a las pistas en el parque María Behety
Formada por menores de 7 a 16 años
Las atletas reconocieron que poder correr nuevamente les ha devuelto el entusiasmo, después de meses en los que tuvieron que conformarse con clases a través de la plataforma Zoom
Es cierto que aún es muy prematuro para decir que lo peor de la crisis del Covid-19 quedó atrás. Aunque Punta Arenas ya lleva un par de semanas en Fase 2 y la comunidad está llevando una vida relativamente normal, si se la compara con lo vivido durante la cuarentena, las actividades deportivas recién están asumiendo este nuevo estado y retomando gradualmente sus entrenamientos.
Es cierto que todas las actividades físicas continuaron durante el año a través de las plataformas virtuales como Zoom, con clases, charlas y entrenamientos, pero en el caso del atletismo, nada pudo suplir la sensación de correr al aire libre, de cara al viento. Por eso, para los atletas del Club Deportivo Extremo Austral, calzarse las zapatillas y volver a las pistas, ha sido toda una alegría.
Como la Fase 2 trae consigo restricciones, solamente una decena de deportistas del club puede participar de las prácticas, que se realizan en el parque María Behety, lo que no deja de ser curioso, tomando en cuenta que en los malls y centros comerciales, circula mucha más gente. Pero a pesar de ello, una decena de chicos se reúne en el popular parque en esta vuelta a los entrenamientos presenciales.
Al mando está la técnico y preparador físico Marcia Ojeda, quien explicó la modalidad de trabajo: “Tenemos 13 niñas y un varón, la mayoría de ellas son del Liceo María Auxiliadora, también tenemos del Colegio Cruz del Sur, Liceo San José, y del Instituto Sagrada Familia. Nosotros llevamos un par de meses, pero más de un año como club con personalidad jurídica. Comenzamos con muchas clases por Zoom y cuando estuvimos en Fase 2 hace un tiempo, pudimos hacer entrenamientos un par de semanas, pero ahora que volvimos a Fase 2, pudimos retomar lo presencial, con clases tres veces a la semana, lunes, miércoles y viernes, durante una hora y media”, indicó.
Esperan volver al estadio
En el club entrenarán todo el verano, “a la espera que el IND nos dé una respuesta, porque hicimos reuniones con las asociaciones, para que se finiquite un tema de firmas para que el estadio pueda entrar en funcionamiento y podamos entrar con todos los protocolos que se requieren: vamos a estar una hora por club federado para ocupar la pista, de lunes a viernes y estamos en eso. Creemos que ya estando en Fase 2 es la oportunidad para sacar a las chicas del confinamiento de las casas, que ha costado mucho”, reconoció la entrenadora.
Al ser el atletismo un deporte esencialmente de pista, hubo muchas limitaciones a la hora de desarrollar las clases, porque “en las clases por Zoom nos dedicamos únicamente a hacer trabajo físico, más de eso no se puede, por el espacio. Hay chicas que viven en departamentos o casas pequeñas, tienen más hermanos. Ahora estamos con el periodo básico, no sabemos hasta cuándo, porque si volvemos a cuarentena tendremos que volver al trabajo físico, entonces para los profesores ha sido súper complicado hacer una planificación estructurada, así que todo es incierto”, admitió Marcia Ojeda.
La ventaja, entre comillas, es que el club es de carácter formativo, por lo que no se prepara a las deportistas para pruebas específicas. “Me dedico a la parte formativa, niñas pequeñas que están recién aprendiendo a correr, saltar; más que la técnica buscamos que adquieran conocimiento en todas las pruebas, para que el día de que tengan una edad suficiente, decidan en qué prueba se pueden enfocar o ver en cuál tiene más habilidad”, detalló la entrenadora, que enseña pruebas como salto largo, velocidad, lanzamiento de bala o jabalina.
Ojeda tuvo cuestionamientos sí para la medida de limitar a diez la cantidad de alumnos en espacios abiertos: “Si me preguntan a mí, de manera muy personal, aunque creo que mis colegas piensan igual, creemos que es ilógico que haya 10 personas trabajando mientras en el mall entran miles de personas y a nosotros nos prohíben a hacer un deporte que, ayuda no sólo a la parte física, sino a la psicológica; hay niños que están subiendo mucho de peso, la ansiedad es increíble, niños con síntoma de depresión a muy temprana edad. Lo que nos queda es seguir buscando la forma de poder continuar con el deporte que tanto nos apasiona y que no le hacemos daño a nadie, al aire libre; lo importante es que tenemos nuestro protocolo: se les toma la temperatura, cada una tiene su alcohol gel, pañuelos desechables, su agua; tratamos que mantengan la distancia, que cuesta, porque son todas pequeñas”.
Como las clases se mantendrán durante enero y febrero, las inscripciones están abiertas para talleres de formación motora, actividad física para niños de 4 a 14 años, con horarios a convenir, con precios conversables, consultas que se pueden hacer al +56993004911.
Felices de volver a correr
El clima ha estado muy variable en los últimos días, con calor, viento, frío y lluvia, pero nada de eso importa a las deportistas, que están felices por volver a correr al aire libre.
Isidora Labbé pasó a octavo básico en el Liceo María Auxiliadora y comentó que “ya me tenía agobiada el encierro, fue una libertad que sentí, porque estoy acostumbrada a entrenar afuera, así que me liberó del estrés. Todo el entrenamiento era por Zoom y a veces se nos iba el Internet. Además, llevo cuatro años en atletismo, así que obviamente estaba acostumbrada, daban muchas ganas de salir”, recalcó la deportista que practica 400 metros planos y salto largo.
Sobre el retorno a los entrenamientos de campo y no virtuales, reconoce que lo más complicado es usar mascarilla y mantener el metro de distancia con las compañeras. También, ha notado que ha perdido resistencia, velocidad y coordinación, “así que esperamos seguir y no retroceder”.
Sofía Hernández, también del Liceo María Auxiliadora, lleva siete años en la práctica deportiva, por lo que “fue emocionante cuando dijeron que íbamos a volver a entrenar. Lo que más me ha costado es que apenas partí sentí dolores en la pierna, ya no puedo correr tanto como antes y me canso más rápido. Me aburría las clases online y no era mucho de participar”, admitió la estudiante de octavo básico.
Solamente un año lleva Martina Lara practicando atletismo. La estudiante pasó a cuarto básico y contó que “me ha parecido divertido, la profe está haciendo un buen entrenamiento, a veces le pedimos que nos haga otra pasada más, porque nos encanta. Estábamos esperando con muchas ansias salir al estadio o al parque María Behety. Las clases online no eran aburridas, porque la profe siempre hacía lo mejor para que estemos felices, pero sí daban ganas de salir a correr”, expuso la pequeña deportista, que practica prueba de relevos y salto largo.
Finalmente, Antonella Miranda pasó a segundo básico, también en el Liceo María Auxiliadora. Lleva dos años y medio en el atletismo y comentó que “no me ha costado tanto, lo que sí me costó fueron las clases online. Sí me pasaba que me costaba ir más rápido, y mantener el metro de distancia. He realizado pruebas de salto largo y relevos”.