La invalidación es el aspecto que más lamentan los pacientes
Para el paciente porvenireño Osmán Riveros Cortés (taxista, 42 años), tener que viajar a recibir diálisis por 3 o 4 días a Punta Arenas (a veces una semana) conlleva grandes gastos, por eso entiende a los vecinos que han optado por irse a vivir a esa ciudad para seguir tratamiento. “Claro que es necesario tener una máquina de diálisis en Porvenir, ya que hay adultos mayores y también muchos ‘cabros’ jóvenes que deben recibir tratamiento”.
Cuenta que la enfermedad renal se le detectó hace 5 años y ya lleva un año dializándose, con los costos de viajar siempre a controles y tratamiento. “Hay porvenireños que se han ido a vivir también a Natales, como una vecina mía, por eso faltan máquinas y especialistas acá. Esta es una enfermedad bastante invalidante -estimó- y eso que yo no tomaba ni fumaba”.
Explica que a él le significó dejar muchas cosas que amaba hacer, como practicar deporte o viajar a la naturaleza. “Hasta ahora no puedo jugar a la pelota y sólo a veces hago ejercicios para mantenerme”.
“Le hago un llamado a las autoridades a que se la jueguen por Porvenir, ya que siempre le toca a Punta Arenas y Natales, ¿porqué a Porvenir los encargados de la Salud lo dejan afuera?. Tienen un tremendo y hermoso hospital y no tiene la capacidad de tener in especialista en diálisis, ¡es injusto!”, exclama.
Afirma que pese a tener una máquina portátil, todos los meses el hospital le manda un consumo. Termina indicando que cuando pidió tener una máquina en Porvenir, lo escucharon y se destinó una al centro asistencial fueguino, la que se mantiene operativa para reemplazar la de cualquier usuario al que se le eche a perder la propia.