Cientos de migrantes partieron de Honduras con rumbo a EE.UU.
Cientos de migrantes hondureños partieron rumbo a la frontera con Guatemala con la esperanza de llegar hasta Estados Unidos.
Otras caravanas que recientemente emprendieron el viaje han sido desarticuladas por las autoridades guatemaltecas, y este grupo relativamente pequeño pareció disolverse antes de llegar a la frontera con Guatemala en un día en el que la Vicepresidenta de EE.UU., Kamala Harris, habló con el Presidente guatemalteco Alejandro Giammattei sobre cuestiones de migración.
Hombres y mujeres jóvenes, así como familias que cargaban niños pequeños, caminaron por una carretera muy transitada de seis carriles que sale de San Pedro Sula. Formaron pequeños grupos, y muchos de ellos consiguieron viajes gratuitos hacia el cruce fronterizo en Corinto.
Pero fueron relativamente pocos los que llegaron al paso fronterizo oficial, ya que probablemente muchos decidieron cruzar en los numerosos puntos ciegos que hay a lo largo de la frontera para evitar ser detectados. Antes de llegar a la frontera, en el lado hondureño, había tres puestos de control donde las autoridades revisaban los documentos de los migrantes, sobre todo de aquellos que viajaban con niños. En el lado guatemalteco, había varios retenes militares más.
Desde hace días circulaban convocatorias para formar una nueva caravana de migrantes, pero acudió menos gente de la que se reunió en enero. Esa caravana, que llegó a tener algunos miles de personas, fue dispersada por las autoridades guatemaltecas con gases lacrimógenos y equipo antimotines.
Los gobiernos de México y Guatemala han adoptado recientemente medidas más estrictas contra esas caravanas, presionados por Estados Unidos.
Entre los migrantes ha habido esperanzas de que el gobierno del Presidente estadounidense Joe Biden adopte una posición más compasiva hacia ellos, pero funcionarios de la Casa Blanca llevan meses intentando dejar bien claro que la frontera de Estados Unidos está cerrada.
El gobierno de Biden ha dicho que desea invertir 4.000 millones de dólares para impulsar el desarrollo en estos países con el fin de atender las causas profundas que originan la migración.