A los 84 años muere recordado cuidador de la maestranza municipal

Por largos 31 años se transformó en el guardián de la maestranza municipal. Eduardo Segundo Sánchez Mancilla fue el receptor y cuidador de miles de vehículos que por distintas razones fueron retirados de circulación y enviados a los corrales, primero en calle Pérez de Arce, luego en villa Las Nieves y finalmente en el Barrio Industrial.

Eduardo Sánchez se había acogido a retiro de la municipalidad en diciembre de 2019 y en marzo del año siguiente le diagnosticaron un cáncer de huesos. Su vida se apagó este domingo, a la edad de 84 años.

“Ingresé a la municipalidad el 1 de marzo de 1988 gracias a Sergio Becerra, con quien trabajé en isla Riesco, en la explotación del carbón”, recordó en una entrevista concedida a este diario en 2013.

Su tarea de cuidador en la maestranza estuvo acompañada de numerosas anécdotas, varias de ellas tenebrosas y que confirmaban lo sobrenatural, donde más que un mito urbano es una realidad, en especial cuando se producía el ingreso de un vehículo que había sido protagonista de un accidente con personas fallecidas, donde el caer la noche era testigo de episodios inexplicables que lo dejaba helado, como el funcionamiento de los limpiaparabrisas, el encendido de luces o la activación de la bocina.

Sánchez Mancilla vivió siempre en calle Hermann Eberhard, en la población Carlos Ibáñez, donde en los ochenta perdió su vivienda a causa de un incendio. En lo deportivo, fue jugador y presidente del Club Deportivo Independencia.

Enviudó muy joven, de cuyo matrimonio nacieron Eduardo, Patricio y Rossana Sánchez Ampuero. En segundas nupcias, se casó con María Cárdenas, con quien tuvo otros tres hijos: Sergio, Cristóbal y Pablo Sánchez Cárdenas.

Sus funerales se realizarán a las 15 horas de hoy en el Parque Cementerio Punta Arenas, al sur de la ciudad.