A esta hora nos encomendamos

Son las dos de la tarde de este domingo 16 de mayo de 2021, es un día histórico para Chile. Por primera vez en la Historia de nuestro largo y angosto país, estamos eligiendo, a quienes discutirán y escribirán la Nueva Constitución que regirá los destinos de Chile. Todas las anteriores versiones de las Constituciones han sido escritas por iluminados y selectos (algunos no tanto) caballeros. Por primera vez habrá mujeres y hombres en forma paritaria y habrá miembros o representantes de los pueblos originarios.

Hasta allí todo bien. ¿Qué espera uno de ello y de ellos o elles como quiera o sea? Que reine el diálogo, y que dos más dos sean cuatro y no cinco. Es decir que la minoría sea respetada, pero la minoría no tergiverse la fuerza de la mayoría. Espero también que seamos más chilenos (todos) y no sigamos entregando el país a intereses foráneos o a particulares y mezquinos intereses dentro de Chile. Las aguas y los recursos naturales, son de todos los chilenos y en general son para uso y goce del ser humano. Ya hemos escrito columnas anteriores en forma específica de esto.

¿Sabía que los derechos de agua son vitalicios y heredables? ¿Le parece bien, que se especule con el recurso natural más importante y básico que el ser humano necesita?.

Como buen regionalista, (y del centro hacia la izquierda), espero que se discuta (e imponga) un nuevo modelo de organización político administrativo del país. “Menos centro y más periferia”. “Más presencia, voz y recursos para y por las regiones”. Creo firmemente que Chile saltará al desarrollo cuando se terminen los abusos, de ”llevarse la pelota para la casa” como ha sucedido en los más de 200 años de vida republicana y, lo más importante se entienda que un modelo sustentable es un modelo en que todos hacen esfuerzos y todos tienen beneficios. No sólo algunos privilegiados. Además, cuando Chile entienda que el desarrollo de las regiones (más del 60 por ciento del país) es el verdadero salto al desarrollo. Desarrollo Humano y no tantos indicadores de ingreso per cápita, los que son importantes, pero no demuestran o logran lo que los chilenos quieren y necesitan.

Y en esta ocasión, otra elección inédita en la historia republicana de Chile, es la elección de los nuevos Gobernadores Regionales. Por primera vez, habrá en la región dos autoridades políticas de “carácter ejecutivo” (sin contar a los Alcaldes que también lo son). Por un lado, estará el nuevo gobernador regional, electo por la ciudadanía (espero haya segunda vuelta si alguno de ellos no llega al 40 por ciento de la votación), de manera de que quien finalmente llegue a ser el ungido, lo haga desde la humildad y no desde la soberbia y el excesivo personalismo.

Es cierto que el nuevo gobernador, tendrá que tener y convivir dentro de la región, con el o la Delegado o Delegada Presidencial, que será una especie de actual intendente (a), que someterá su conducta a lo que le dicten desde el Palacio de la Moneda. Será una necesaria convivencia, la que se tendrá que dar y el gobierno central tendrá que escuchar más el pulso de la región, esta vez, a través de lo que no sólo le indique su empleado o empleada (Delegado(s) Presidencial), sino de la voz del nuevo Gobernador. Es de esperar que el nuevo Gobernador construya región también con el Consejo Regional (Core), el cual tiene la virtud por su composición, de ser un cuerpo colegiado diverso en lo político y en la distribución territorial al tener miembros de las cuatro provincias de la región.

Es de esperar que el nuevo paso en la descentralización del Estado, sea mayor asignación de recursos a la región, a través de una Ley de Rentas Regionales y muchas otras responsabilidades y atribuciones que se tendrán que pelear en lo siguiente por todas las fuerzas vivas. No será fácil, ¿pero cuándo lo ha sido? .

Por último, tendremos nuevas autoridades municipales, en el ámbito de la Alcaldía (espero) y en la constitución del nuevo Cuerpo de Concejales en todos los municipios de la región. Es de esperar que los Concejos se integren plenamente a la vida y el pulso de su comuna. Sean los mediadores entre la población y la Autoridad Ejecutiva. Fiscalicen de verdad al Alcalde, pues es esa, su más importante función y logren con la impronta que tienen, ser un aporte a las áreas siempre más olvidadas, como los adultos mayores, los más carenciados, los deportistas, los artistas y gestores culturales. Espero haya ido a votar. Si lo hizo, sólo a encomendarnos ¡¡¡.