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Investigación abordó a “cuidadores” informales en Magallanes

Lunes 7 de Junio del 2021

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Cuidadores principales informales no remunerados: ¿Quiénes cuidan a niños, adultos y adultos mayores en situación de discapacidad?”. Es el título de la investigación realizada por el jefe de la Unidad Psicosocial de la Corporación de Rehabilitación Club de Leones Cruz del Sur, Alejandro Yelinicic que tuvo como propósito caracterizar a los cuidadores informales no remunerados de personas en situación de discapacidad en estado de dependencia.

La mayoría de las personas con discapacidad de alta dependencia recibe ayuda en sus hogares, estando a cargo de familiares, quienes, muchas veces sin capacitación ni conocimientos adecuados, proporcionan la atención permanente e intensiva que requieren. Los cuidadores principales cumplen una función silenciosa, alejados de políticas públicas como receptores de ayuda o beneficios, sometiéndose a sobrecarga emocional

Este estudio concluye que los cuidadores principales son mayoritariamente mujeres (84,9%). Además, existen más mujeres cuidando a niños (91,8%) que hombres cuidando a niños (8,2%) en comparación con adultos y adultos mayores, donde el porcentaje de cuidadores masculinos llega al 31,3% y el 30,3% respectivamente. Los principales cuidadores de niños son sus madres, con el 87,5%; en cambio, en el grupo de cuidadores principales de adultos, la relación de parentesco es principalmente de cónyuge (42,7%), seguido por la madre (32%). En el grupo de cuidadores principales de adultos mayores, la relación de parentesco es mayoritariamente de cónyuges con un 47,8%, seguido por su hijo o hija, con el 31,3%.

“En nuestro estudio, identificamos a la madre como principal cuidadora de niños y en el caso de los adultos y adultos mayores son sus cónyuges. Esto se puede explicar porque las expectativas de vida son mayores en la actualidad, siendo la pareja una figura que puede ejercer el cuidado, ya que acompaña por más años a su pareja. Además, como parte del ciclo vital, se espera que los adultos en la etapa de la ancianidad sean los responsables de cuidar a su pareja. Lo anterior coincide con que las hijas de las personas en situación de discapacidad poseen una actividad laboral remunerada, delegando esta función hasta que no exista otra opción de cuidador principal”, señaló el investigador a cargo.

En cuanto a la actividad de los cuidadores principales, se observa que el 43,7% se encuentra en su hogar permanentemente y 56,3% mantiene una actividad laboral, ya sea en forma ocasional, independiente o permanente. Los datos arrojados no coinciden con otros estudios que mencionan que la mayoría no posee un trabajo remunerado, lo que hace predecir que muchas personas en situación de discapacidad en estado de dependencia pueden quedarse en algunos momentos solos o a cargo de un cuidador secundario, siendo lo primero una situación de riesgo y lo segundo una instancia que podría favorecer la salud mental de cuidador.

Finalmente, concluyen: “Es importante favorecer una red de apoyo que a través de la organización dé respuesta a múltiples necesidades del cuidador, tales como: habilidades de afrontamiento, manejo del duelo, resiliencia, aceptación diagnóstica, entre otras. Todo esto en busca de mejorar la calidad de vida del cuidador principal”.

Se trata de un trabajo que fue publicado en la Revista científica Rehabilitación, que es la publicación oficial de la Sociedad Española de Rehabilitación y referente de la mayoría de las Sociedades de la Especialidad de los países de habla hispana. La investigación de carácter cuantitativo consideró a 936 cuidadores informales, quienes desempeñan su labor en Magallanes y cuya información fue recogida desde la base de datos de la Corporación de Rehabilitación del Club de Leones Cruz del Sur.