Proyectos por $50 mil millones se han visto frenados por la pandemia

El consejero Miguel Sierpe Gallardo teme que esto pueda influir negativamente en la asignación presupuestaria del próximo año.

Su preocupación porque “se sigan cayendo” proyectos para Magallanes hizo presente el consejero regional Miguel Sierpe Gallardo, señalando que la situación de pandemia ha tenido un impacto negativo cercano a los $50 mil millones en iniciativas que no se van a ejecutar.

El integrante del Consejo Regional dijo que lo anterior no sólo tiene un efecto inmediato sino que también podría instalar un escenario complejo para el próximo año en materia de asignación presupuestaria, razón por la cual espera que exista una mayor flexibilidad por parte del gobierno a la hora de considerar la realidad a la que se están viendo enfrentadas las regiones en materia de ejecución de proyectos.

“Calculo que se nos han ido cayendo 50 mil millones de pesos en proyectos que no se van a ejecutar, proyectos asignados a empresas constructoras que renunciaron a realizarlos aun a costo de pagar multas o responder a las boletas de garantías. Y eso es relevante, porque tiene que ver fundamentalmente con lo que pase el otro año respecto el presupuesto regional”, enfatizó Sierpe.

Agregó que a lo anterior se debe considerar que hay otros proyectos en licitación que también se ven en riesgo “de terminar como el consultorio 18 de Septiembre, el Centro de Salud Mental o el Centro de Geriatría. Nosotros teníamos asignados recursos para estos proyectos, pero terminaron siendo insuficientes por las condiciones económicas que se están presentando”.

Sobre el mismo tema la secretaria regional ministerial de Economía, Natalia Easton, comprometió los esfuerzos de su cartera para compartir la visión del consejero regional y buscar con el resto de los ministerios una mayor flexibilización, para que lo ocurrido en cuanto a la no ejecución de proyectos no repercuta negativamente en la asignación presupuestaria del próximo año.

La postergación de los proyectos ha estado estrechamente ligada al explosivo aumento de los costos, principalmente en materia de transportes y en materiales de construcción (falta de stock). Dicha situación también ha venido siendo abordada por las autoridades regionales y por las entidades ligadas al sector de la construcción.