Madres protestan en el Serviu por “subsidios fantasmas” y exigen solución a años de espera
El sueño de la casa propia se ha convertido en una pesadilla para unas 65 familias que postularon a los subsidios DS1 Tramo 1 y que tras años de espera, aún no ven concretados sus esfuerzos. Algunas familias llevan casi cinco años sin tener las llaves de su casa y con la incertidumbre de estar pidiendo prórrogas o incluso, ver caducar su trámite y tener que postular nuevamente.
Según la definición del Servicio de Vivienda y Urbanismo, el DS1 Tramo 1 “permite a familias que no son dueñas de una vivienda y tienen capacidad de ahorro, acceder a una ayuda económica para comprar una casa o departamento nuevo o usado de un valor máximo de 1.200 Unidades de Fomento (este último monto en caso de zonas extremas).
En los rostros de estas familias que no aparecen en las estadísticas del Ministerio de Vivienda y Urbanización, la molestia era más que evidente y, cansadas de tanta dilación, concurrieron hasta las oficinas del Serviu, para exigir una solución inmediata. De esta manera, unas quince mujeres, algunas con sus hijos, llegaron con pancartas a protestar, ingresando incluso al edificio de los Servicios Públicos, tras lo cual accedieron al octavo piso para solicitar explicaciones.
La representante de las familias, Daniela Saavedra, presentó el problema que los aqueja: “No nos han dado ninguna solución, creo que esta es la tercera protesta que hacemos y solamente hemos recibido ‘calmantes’. A este subsidio se postula individualmente, pero no hay dónde adjudicarlo. Nosotros no queremos hacer problemas, solamente queremos una respuesta; estamos cansadas de las mentiras que nos dicen acá. La solución está, pero no quieren hacerse cargo. Haremos muchas cosas más hasta que tengamos las llaves de las casas en nuestras manos”.
En las reuniones que han sostenido con el director del Serviu, Dubalio Pérez y el seremi subrogante del Minvu, Rafael Vidal, “solamente hemos tenido pretextos, que tenemos que esperar lo que se diga desde nivel central. No estamos para el juego de ellos. Yo me gané el subsidio en febrero, pero aquí hay familias que están desde 2017 esperando y es una vergüenza que tengas a tantas familias arrendando, y no les puedan dar una solución. La única que dan es una prórroga. Llamo a la gente que no postulen por intermedio del Serviu al DS1 Tramo 1 porque es una vergüenza, son subsidios fantasmas, porque te lo dan para que lo tengas guardado en tu casa”.
Un caso llamativo es el de Evelin Hernández, ciudadana peruana que lleva 17 años en Chile, tres de ellos en Punta Arenas, pero que desde 2017 espera tener su casa propia, teniendo solamente un ya añejo papel que indica que obtuvo su subsidio. “Se siguen alargando los plazos, he acudido al Serviu estos años, desde que se inició la pandemia, me tienen diciendo que unos meses más y no se ha dado ninguna solución. Yo tengo tres hijos y necesito seguir luchando por ellos. Estoy arrendando y tampoco nos apoyan, por ya tener el subsidio. Estuvo postulando desde 2006 hasta que lo obtuve y llevamos muchos años esperando. El subsidio no se hace valer ni en Santiago ni en Punta Arenas, así que es un subsidio fantasma”, reiteró.
Situación similar sufre Camila Cruz, otra joven madre que se cansó de esperar respuestas que nunca llegan. “Desde 2019, que me gané el subsidio, he estado esperando. Solamente nos han dicho que no hay proyectos, porque ninguna inmobiliaria está trabajando con DS1 Tramo 1, y no hay solución para nosotros. Es una vergüenza que nos hagan esperar tanto tiempo, más en pandemia, familias que tienen que arrendar, otras que viven hacinadas. Nosotros somos tres y vivimos en una pieza, y por el tema Covid tuvieron que salir otras personas de la casa para que no tuviera que exponer a mis hijos, y llegaron a sacarnos. Por eso, es una vergüenza que, teniendo un subsidio ganado, no podamos usarlo. Mi niña va en kínder y vivimos con otras dos niñitas que también van en kínder, estamos todos en la casa, hacinados, y con un subsidio ganado que me costó juntar el dinero, porque no fue nada un millón de pesos, fue mucho más, tuve que postular con 4 millones de pesos, me tuve que conseguir dinero con familiares, entonces que no nos den una solución digna, no corresponde. Estamos desde marzo luchando por esto y no hay respuesta”.
Tras unos momentos de tensión en las oficinas del octavo piso, el seremi subrogante del Minvu, Rafael Vidal accedió a reunirse con dos dirigentas, encuentro que se extendió por más de una hora y media, tras lo cual, la autoridad se comprometió a que si el 9 de julio no obtiene una respuesta, desde nivel central, él mismo viajará a Santiago a buscarla.
Así que estas mujeres seguirán apelando a la fe para poder ver que esta nueva promesa, se concrete.