Piden establecer plan piloto para reactivar turismo en Magallanes

Gremios del turismo enviaron carta al ministro de Economía donde plantean establecer un corredor directo entre el aeropuerto de Santiago y Magallanes para el flujo de pasajeros. Todo ha sido analizado con el Colegio Médico.

Unos siete mil empleos directos, de las numerosas empresas de turismo instaladas en la Región de Magallanes y Antártica Chilena, corren serio riesgo de perderse en lo que queda del año ante la incertidumbre que exista respecto de la posible pérdida de la temporada de turismo internacional en la región.

La situación se agudiza ante la posibilidad que varias empresas no puedan revertir el crítico momento y deban declararse en quiebra o dejar de operar en una actividad productiva que se consolidó en los últimos 30 años.

“Es imposible que resistan otra temporada sin trabajar los hoteles en Torres del Paine, en Natales. Hay que imaginarse qué pasará con los transportistas, los guías, entre otros”, señala Paola Milosevic, presidenta de la Cámara de Turismo Austro Chile.

Ante este escenario, donde muchas empresas ni siquiera han podido retomar su funcionamiento porque ni siquiera hay certeza que las fronteras se abran en noviembre, las reservas que había a contar de la primavera o fines de año están cancelándose y esos pasajeros que ya se vacunaron preventivamente están suspendiendo sus reservas para venir a Magallanes y están mirando a mercados de Estados Unidos, Europa y el Caribe, advierte Milosevic.

Agrega que Uruguay anunció que abrirá el turismo desde septiembre, al igual que Argentina recibe turistas como en el resto de Sudamérica.

“Por un lado quieres venir a un destino seguro, porque ellos se han preocupado de vacunarse y estar seguros, pero no los dejamos entrar, nadie sabe qué hacer. Imagínate lo que es abrir un hotel completo y contratar gente sin saber si podrás abrir ni cuándo. Las reservas de octubre se empezaron a caer abruptamente y bajaron también las que estaban pidiendo para noviembre en adelante”, dice la dirigenta del turismo.

Propuesta a autoridades

Por ello es que los gremios del turismo de toda la región enviaron ayer una carta al ministro de Economía, Lucas Palacios, con copia al gobernador regional Jorge Flies y a la delegada presidencial Jenniffer Rojas, planteando la necesidad de reactivar al sector y evitar la quiebra masiva de cientos de empresas en desmedro de un sector que genera el 12% del Pib regional.

“Ninguna industria puede sobrevivir casi dos años sin poder trabajar y con un nivel de incertidumbre que no permite tener una luz de esperanza para proyectarse, reordenar pasivos y ver cómo salir de esta crisis. Consideramos que, en estos 16 meses de experiencia en el manejo de la crisis sanitaria en Chile, con el 80% de la población vacunada en el país, el 92% vacunados en Magallanes y comparándonos con el resto del mundo, ya estamos en condiciones de comenzar a planificarnos para una futura apertura de fronteras, por tanto, reactivar el turismo en forma segura”, plantean en la carta.

Luego enumeran uno de los tres destinos exportables y de connotación mundial que tiene Chile es la Región de Magallanes y Antártica Chilena, que dispone de 2.737 empresas relacionadas al turismo, de las cuales el 80% son microempresas, con alto grado de vulnerabilidad financiera y escaso acceso a la banca privada.

Los tipos de empresas que mayor participación presentan en la industria son restaurantes y similares (23%); alojamiento turístico (19%); transporte de pasajeros por carretera (19%) y transporte de pasajeros por agua (14%), todas conforman el sector más afectado por las medidas implementadas por la autoridad sanitaria para el control de la pandemia del Covid-19 durante el 2020 y 2021.

Además, destacan que los principales clientes del turismo en Magallanes son extranjeros, en su mayoría norteamericanos y europeos. Por ello, plantean que Magallanes no puede seguir cerrada al turismo internacional, creen que, tomando todos los resguardos y filtros sanitarios, el turismo debería comenzar a funcionar paulatinamente, logrando que coexistan la salud y economía. Para ello, elaboraron la propuesta, basada en el trabajo con distintos actores regionales como Colegio Médico Regional, el Colegio de Expertos en Prevención de Riesgo de Chile, reuniones con el seremi de Salud, Sernatur, Economía, gremios del resto de Chile y de Magallanes.

Medidas a corto plazo

Proponen a corto plazo permitir el ingreso por el aeropuerto internacional Arturo Merino Benítez a extranjeros no residentes con destino a la Región de Magallanes (aeropuertos de Puntas Arenas y Puerto Natales), contando con esquema de vacunación completo (homologando esquemas efectuados en el extranjero) y con PCR negativo no mayor a 72 horas. Además, exigencia de seguro de viaje con cobertura Covid-19. Igual criterio puede ser aplicado a regiones que logren sobre un 90% de vacunación de su población objetivo.

“Comenzar con Magallanes como región piloto dado que el 92% de la población está vacunada y, prácticamente, el 100% de las personas que trabajan en turismo. Para llegar incluso a un mejor control de quienes ingresen, se puede tomar examen de test rápido de antígeno en el aeropuerto de Santiago antes de continuar a Magallanes (aeropuertos de Puntas Arenas y Puerto Natales), eximiendo así la restricción de 5 horas máximo para poder llegar a Magallanes en transporte privado en este corredor seguro y evitando los días de cuarentena, que imposibilitan y discriminan los viajes a las regiones más extremas del país. Una vez en Magallanes, los protocolos deberían funcionar como para cualquier ciudadano que tiene Pase de Movilidad. En caso de cualquier síntoma, se aplica test rápido de antígeno y, de ser positivo, aplicar PCR para detectar variable y  derivación a una residencia sanitaria, donde el costo lo cubriría el seguro de viaje del turista”, señalan.

Además, para un mejor control de la trazabilidad señalan que al ingresar el turista a la región cada alojamiento se hará responsable de pedir lugar previo y próximo de estadía, con todos sus datos en las respectivas fichas de registro, con énfasis en número de contacto y correo electrónico del turista.

Entre otras medidas, plantean que las medidas se implementen de manera experimental durante un mes con una evaluación y trabajo coordinado entre todos los actores.