Obras en la plaza son totales y se extenderán por casi un año
La estructura del otrora busto de José Menéndez es el único elemento que no considera la remodelación de la Plaza de Armas Benjamín Muñoz Gamero. Bien vale la aclaración en respuesta de la incertidumbre que causó el que la pileta de agua ubicada en el sector oriente no esté dentro del cierre perimetral de las obras de remodelación.
La intervención del área se inició oficialmente ayer y se extenderá por cerca de 10 meses, con una inversión de $950 millones. Durante la jornada del martes fue posible observar los trabajos sobre el suelo de hormigón, el que pasará a ser de piedra pulida.
El director de Obras Municipales, Alex Saldivia, explicó que para la intervención se dispuso de 4 fases, de tal manera que el área no sufra el cierre total (como ocurre actualmente con la pileta). En este contexto, las obras de mayor envergadura apuntan al cambio de suelo del sector central donde se encuentra el monumento, y de la base del asta monumental, que dejará su hormigón blanco para ser recubierto con piedra.
Las otras etapas consideran la redistribución y reemplazo de luminarias, la intervención de las áreas verdes, la eliminación de las protecciones vehiculares de hormigón, la incorporación de la huella podotáctil, el mejoramiento del mobiliario urbano y la restauración de la pileta de agua.
El proyecto que se concreta a partir de hoy tiene larga data y su postergación tuvo que ver principalmente con las readecuaciones que debió sufrir debido a las nuevas disposiciones emanadas por el Consejo de Monumentos Nacionales (la plaza fue declarada Zona Típica en 1991) y por los cambios en la Ley de Inclusión.




