Al lugar equivocado

Ocurrió en días pasados y fue testigo un asiduo asistente al céntrico local. El pasado fin de semana se juntó un grupo de amigos y amigas para celebrar el cumpleaños de una de ellas ante lo cual hicieron una reserva en La Taberna donde inclusive al atender el mensaje de whatssap le ofrecieron tenerle una torta a la festejada y -ante tamaño gesto obviamente- lo consideraron para el festejo.

La sorpresa fue grande cuando llegaron a La Taberna y al preguntar por su reserva le respondieron que no había nada a nombre de la persona que lo solicitó. Quien había gestionado la petición dijo que era imposible porque incluso tenía el whatsapp con la persona que había interactuado, pero la incredulidad se agudizó cuando le señalaron que esa persona no trabajaba allí. El asombro fue mayúsculo cuando el que estuvo a cargo de realizar la reserva revisó y se percató que ésta estaba hecha en La Taberna: ¡pero en Perú!

Lo más seguro que habrán terminado festejando igual, pero sin la torta que debió quedar en Perú esperando a la cumpleañera.