Cámara de la Construcción aportó monitores de 50 pulgadas para 15 salas en la Escuela La Milagrosa

Con una matrícula de 1.211 estudiantes en enseñanza básica y media, la Fundación Educacional Escuela La Milagrosa, regresó la semana pasada a las clases presenciales. Pero dada la cantidad de alumnos, los cursos se dividen y mientras algunos van a las aulas, otros siguen desde sus casas, las explicaciones de los docentes. Ello trajo problemas de equipos como televisores, computadores o cámaras, así como un Internet que no dio abasto a las necesidades del establecimiento, que contaba con un servicio hogar y no de empresa.

Para subsanar esta deficiencia, la Cámara Chilena de la Construcción aportó con $20 millones para poder implementar estas clases híbridas, las que continúan esta semana. Según explicó el presidente de la institución, Carlos Braun, la decisión de apoyar al establecimiento se dio de manera casual: “Teníamos unos recursos disponibles, hicimos una lluvia de ideas para ver dónde los aportábamos y apareció la Escuela La Milagrosa, lo que nos tiene muy contentos, creemos que estamos llegando con los recursos donde realmente se requieren. El aporte es de 20 millones de pesos para habilitar quince salas con monitores de 50 pulgadas, sistemas de audio y video para que los alumnos puedan acceder a las clases. Solamente trabajamos con este establecimiento, teníamos recursos acotados, pero creemos que la necesidad es más amplia y creo que hay que hacer iniciativas en esta línea”, declaró.

Los estudiantes valoraron positivamente este aporte, según lo reconoció Daniel Subiabre, de cuarto medio: “Todo ha funcionado bien, se escucha bien en la sala y en la casa; vamos por grupos. El Internet era más o menos lento, había un problema de conexión, se cortaba o escuchaba mal, y ahora está solucionado”, destacó.