Hermana gestiona retirar cuerpo de trabajador que cayó desde altura
Un drama adicional sumó la familia de Javier Oyarzo Almonacid, el hombre de 47 años que el martes en la mañana cayó al vacío de una gran altura, cuando reparaba una techumbre junto a otras dos personas.
El fatal accidente laboral se desató poco antes de las 10 de la mañana, en una vivienda de dos pisos, ubicada en calle 21 de Mayo Nº1350.
La versión que maneja la hermana de la víctima fatal, María Margarita Oyarzo, es que Javier estaba en lo alto de la techumbre. Habían comenzado a cambiar las planchas, pero una no estaba clavada y la misma cedió, justo cuando él pasaba. Perdió el equilibrio, trató de tomarse de un palo y cayó en una voltereta al suelo, prácticamente de cabeza. Se golpeó violentamente en la cerámica. Rápidamente llamaron al Samu pero ingresó al hospital en extrema gravedad y las lesiones lamentablemente terminaron costándole la vida.
Esto es parte también de lo que la PDI le informó a la familia.
Entregan el cuerpo
María Oyarzo realizó ayer los trámites para retirar el cuerpo desde el Servicio Médico Legal y poder sepultarlo. Pero se encontró con problemas propios de las exigencias legales. Por ejemplo, que dicho servicio lo entrega solo a la esposa, hijas o madre del occiso.
El hombre tiene una hija de 22 años, pero no tiene contacto con ella, desde la separación con la madre hace ya muchos años. Mientras que la madre es una persona de 89 años de edad, que vive en Puerto Varas, y que es imposible que viaje a Magallanes.
“Así que estamos haciendo las gestiones para que me permitan retirar el cuerpo de mi hermano, porque hay muchísima gente que nos ha preguntado por el funeral”, apuntó María Oyarzo.
“El era una persona tremendamente querida y muy conocida. Actualmente trabajaba por su cuenta en obras menores. Antes estuvo en Dicarma, en Laguna Parrillar y muchos otros lados, donde lo querían mucho. Estamos impresionados de todo el cariño que le tenían”.
