Karl Wurth en busca de su destino en el tenis de EE.UU.
El tenis, si bien se juega desde hace muchos años en nuestra ciudad, sin duda no es uno de los deportes más populares a pesar de contar con un buen número de jugadores que lo practican de forma amateur.
Pero hay un joven puntarenense, Karl Wurth (23 años), quien desde muy niño se inició en este deporte que lo cautivó y que busca su opción de jugarlo en forma profesional, lo que sin duda no es tan fácil como pudiese parecer.
En la actualidad el jugador magallánico se encuentra radicado en Estados Unidos donde está estudiando y también desarrollándose con éxito en la práctica del tenis.
En conversación telefónica nos comentó que comenzó en el tenis a los siete años, “jugué en el circuito patagónico cuando era chico y a los 13 años decidí salir de mi casa e irme a Viña del Mar a jugar ‘full time’. Luego volví un tiempo a Punta Arenas, porque extrañé un poco la casa, pero desde los 15 años estuve todo el día dedicado al tenis, en ese minuto ya radicado en Santiago”.
CIRCUITO
DE MENORES
“Jugué en el circuito nacional de menores, también un par de torneos internacionales, no muchos porque es bastante caro viajar y jugar fuera. Lo mejor de mi carrera de junior fue en mi último año donde llegué a ser número uno de Chile durante toda la temporada”, nos comentó Karl.
“Como técnicos tuve en Viña a Daniel Palominos, después en Santiago entrené con José Miguel Ayala, con quien estuve unos cuatro años hasta que cumplí los 19 y me decidí jugar como profesional de lleno y no ir a la universidad”.
“También, cuando tenía 18, viajé a Bélgica para entrenar con Juan Pablo Abarca, un chileno radicado allá y que trabaja en la academia de la tenista Justine Henin, ex número 1, donde estuve cuatro meses”.
“Volví a Chile y tuve la mala suerte de lesionarme la muñeca e intenté volver a Bélgica, pero en ese minuto no era lo suficientemente maduro como para vivir allá y poder jugar bien al tenis. Decidí volver y empecé a entrenar con Martín Rodríguez en Santiago, quien fue entrenador de Fernando González y es el tío y entrenador de Nicolás Jarry de toda su vida”.
“Luego me fui a Argentina un tiempo entrenando con César Chiappari y Andrés Scheniter, quien fue entrenador de Garin por mucho tiempo, pero con 21 años recién cumplidos decidí venirme a Estados Unidos, básicamente porque en la carrera de tenista profesional no me había ido muy bien por lo que económicamente estaba muy difícil sustentarla”.
“El tenis universitario es por equipos. Cada equipo tiene alrededor de ocho jugadores que juegan normalmente y se van rotando. Un partido de equipos tiene seis juegos de singles y tres de dobles, parecido a Copa Davis. Yo no juego los seis partidos sino que en uno de los seis. He tenido la suerte de participar en singles y dobles”.
“En mi primer año de mi primera universidad tuve la suerte de ganar los Regionales e ir a los Nacionales donde perdí la final en dobles. Gracias a eso el equipo me miró como buen doblista. El dobles en el tenis universitario es demasiado importante”.
“El primer año llegué a un ‘community college’ (Seward College), que es similar a un instituto en Chile, donde me fue muy bien al haber llegado a los Nacionales en dobles y de haber hecho también una muy buena campaña en singles”.
“Recibí muchas ofertas después de mi primer año y tuve la posibilidad de transferirme a otra universidad (Indiana Wesleyan University), donde estoy jugando single y dobles y llegamos a estar sextos en el ranking de Estados Unidos”.
¿Cómo calificas tu tenis?
“Soy un jugador agresivo, principalmente por mi biotipo donde aprovecho mi estatura de 1,95 metros y he diseñado un estilo de juego basado en mi contextura física”.
“Creo que tengo buen saque, regularmente sobre los 200 kms./h., y a partir de eso manejo la posibilidad de ser agresivo desde la primera pelota. Es el estilo de que trato de plantearle a los rivales. Soy mucho de ir a la red y atacar, así miro el tenis, no me imagino esperando para ganar un punto, siempre me inculcaron eso”.
“Me gusta mucho jugar en arcilla, porque en Santiago entrené mucho tiempo en esa superficie, pero yo me crié en las canchas rápidas de Punta Arenas y acá es pura cancha rápida. Ahora me gusta más, uno corre menos y el saque hace mucho más daño y puedo tener mayor dominio. En arcilla uno tiene que trabajar mucho los puntos y por mi contextura física eso me juega un poco en contra”.
“La cancha dura acá es de asfalto, muy similar a las de Punta Arenas pero un poco más rugosa porque le ponen una pintura para que la cancha sea áspera. En líneas generales es casi lo mismo que en Magallanes”.
“Recién acabamos de terminar la temporada de tenis, hace una semana, que fue un poco corta, donde jugamos nuestra conferencia que sería como hacerlo contra universidades de nuestra región”.
CAMPEONES
“Por suerte la temporada por equipos nos fue muy bien, salimos campeones de la conferencia y eso nos asegura un puesto en los Nacionales que jugaríamos en mayo, pero partiríamos en enero con unos nacionales en canchas bajo techo. El Nacional será en Alabama y van 25 universidades de todo el país”.
“Terminé invicto en singles y dobles, esta temporada perdí sólo un partido que fue en individuales en cuartos de final. Jugué alrededor de quince partidos y a raíz de eso salí entre los primeros en el equipo ideal de la conferencia”.
“Nuestro objetivo como equipo será tratar de ser campeones, nos reforzamos mejor que el año pasado y me he esforzado mucho para ser un buen aporte para el equipo”.
“Mi idea es sacar adelante mis estudios de ‘Business’ (ingeniería comercial) y retomar mi carrera de tenista profesional respaldado por mi título. Siendo bien honesto, hoy estoy jugando mucho mejor que cuando estaba sólo con mi carrera de profesional. Por ahora no me alcanza el tiempo para jugar profesional porque estoy de lleno con mis estudios, pero en el verano -por ejemplo- fui a jugar muchos torneos a Bélgica y me fue bastante bien, gané partidos que antes no ganaba. Como no he podido jugar torneos nacionales por la universidad, no tengo ranking nacional, entones no consigo entrar a los torneos profesionales, me inscribo pero no entro”.
Estudiar y jugar
“Acá, en Estados Unidos, por el nivel de tenis que tengo, existe la posibilidad de estudiar y jugarlo a alto nivel al mismo tiempo. Tomé un plan B de estudiar y tener una carrera para el futuro, pero mi primer objetivo sigue siendo el tenis”.
“Considero que fue la mejor decisión de mi vida por lejos, estoy dominando el inglés como otro idioma, sacando una carrera en otro país, muy gratificante, estoy recorriendo Estados Unidos jugando tenis universitario. Sin duda es un regalo que me ha dado el deporte y no puedo estar más agradecido”.
Karl estudia gracias a una beca deportiva que le entregó una universidad norteamericana, “en Estados Unidos el deporte universitario es demasiado fuerte. En todas las universidades por lo menos existen equipos de básquetbol, fútbol (soccer), béisbol o tenis”.
“Acá es difícil conseguir una beca, pero es gracias al nivel de tenis que he logrado jugar. Lo único que tienes que hacer es enviar tu currículum y ellos te empiezan a enviar ofertas, al punto que la decisión de la universidad en la que estudio no fue la única y tuve la posibilidad de elegir dónde quería vivir”.
¿Son muchas las exigencias deportivas y académicas para los becados?
“Eso siempre tiene que estar. Tienes que rendir en las clases, pasar todas las materias y algunas con buena nota. Afortunadamente hasta el momento no he tenido problemas con eso, de hecho en las notas me ha ido bastante bien, pero es una experiencia totalmente distinta. Hay veces que tienes un partido muy importante y al otro día un examen, tienes que ver la forma de cómo estudiar antes del partido, incluso puedes llegar de jugar un partido a estudiar”.