Más de 900 pacientes fueguinos atiende Programa de Salud Mental del Hospital
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más de 900 pacientes de Porvenir atiende en forma habitual el Programa de Salud Mental del Hospital Marco Chamorro Iglesias, una cifra demasiado alta para una ciudad que apenas se empina por los 7 mil habitantes. “Tenemos aproximadamente 905 pacientes, una cifra bastante alta para una ciudad que bordea los siete mil habitantes, porque la patología de salud mental es bastante prevalente y muchas veces se ignora”, afirma el médico Fernando Rojas, encargado del Programa de Salud Mental del nosocomio insular.
Refiere que el equipo de esa unidad lo integran un médico de cabecera (en su caso, él mismo), tres psicólogas, una enfermera y una técnico, además de todo el equipo de atención primaria de salud, que regularmente les brinda apoyo. “Aparte, tenemos un psiquiatra que atiende de modo online, mediante 2 consultas al mes para psiquiatría adultos, para los casos más complejos, y una vez al mes para infanto-juvenil”, ilustra.
En cuanto a las derivaciones, el médico afirma que no las ha habido, ya que los casos complejos se derivan al psiquiatra que hace la atención a distancia, negando que haya casos graves que se deban evacuar, por ejemplo, a Punta Arenas. Respecto a una paciente que negó la resolutividad adecuada del hospital local (aunque luego se retractó de lo declarado), Rojas explicó que “los tratamientos de salud mental son de larga extensión”.
“Por lo mismo, requieren apoyo multidisciplinario y también de una red de apoyo familiar. Nosotros hacemos una parte, no es como alguna otra enfermedad en que tomar una pastilla basta. Esto no es así, por eso son tratamientos más largos y no es fácil de pasar más tiempo con nosotros”, acentuó.
Atención remota
El doctor Rojas reafirma que el programa a su cargo, durante los peores días de la pandemia del coronavirus, debió atender mediante teletrabajo por 2 motivos: uno, por los funcionarios que estaban fuera del centro asistencial, según el protocolo sanitario establecido al efecto; y segundo, para evitar el riesgo de juntar a los pacientes en una sala de espera, eludiendo eventuales contagios que podrían perjudicar más su salud.
“Se hizo un seguimiento telefónico por todos los funcionarios del equipo de Salud Mental, tratando de cumplir todos los objetivos que antes hacíamos de manera presencial, sabiendo que no era lo mismo. Hace un par de meses hemos retomado los controles presenciales, por lo que nuestros pacientes ya están viniendo. Estamos citando nuevamente a controles para retomar las atenciones que teníamos antes de la pandemia”, cerró el profesional.