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Canil municipal espera encontrar un nuevo hogar para más de cuarenta perros rescatados

Martes 8 de Febrero del 2022

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El sábado se realizó un operativo de adopción canina en Zona Franca, en que los cachorritos fueron los más requeridos. Muchos de ellos encontraron un hogar, algo que no pueden vivir muchos que permanecen en el canil municipal. El recinto se encuentra en el kilómetro 9,5 norte, en el sector conocido como El Rebenque, donde actualmente hay 47 canes. Todos rescatados de la calle, atropellados, heridos, abandonados, incluso por gente que ha tenido la crueldad de dejar cachorros tirados en cajas, en las afueras del recinto.

No es sencilla la tarea para la médico veterinario Natalia Alvarado Isla y el técnico veterinario Claudio Pareja Miranda, que lideran la atención de los cánidos junto a una empresa contratista, que se encarga de la alimentación, aseo y mantención del recinto que, a pesar de que el recinto se encuentra en buenas condiciones, sí están sobrepasados en el número. Además de ellos, hay tres auxiliares y un supervisor. Mientras a lo lejos se escuchan los ladridos, expusieron que la capacidad del canil depende de tres factores: la conducta del animal, su estado sanitario, y su tamaño. “Tenemos 36 caniles, pero se juntan algunos porque son más chicos, son hermanos o se llevan bien, dos o tres en un canil, pero no pueden estar hacinados”, inició Pareja, mientras que Natalia Alvarado recalcó que siempre se están limpiando los espacios, que están calefaccionados, por lo que los perros no permanecen a la intemperie.

El ingreso de los perros al centro de rescate siempre es a través de una denuncia, que se hace a la dirección de Aseo y Ornato, y son aquellos de calle, “pero si alguien denuncia porque está malherido, es mordedor, agresivo o está generando un conflicto en la vía pública con los transeúntes, vamos y lo retiramos. Después se opera, se esteriliza o se determina cualquier tratamiento médico. Una vez recuperado, entra en un proceso de adopción, porque este es un recinto de estadía temporal, no es un refugio ni un hotel, sino que están de paso”, resaltó Claudio Pareja. Sobre todo además, porque como es un centro transitorio, deben atender a mucho perro atropellado y que posteriormente, necesita recuperarse y por eso, no se acepta que una persona quiera entregar perros de manera definitiva.

La adopción es un tema que les preocupa. La veterinaria sostiene que “es difícil que se vaya un perrito adulto o con problema de salud, y tenemos que preocuparnos que haya un flujo constante”. Es por ello que como añade el técnico veterinario, “el perrito puede volver a la vía pública, ya esterilizado, con vacunas, chip. Lo ideal es que vaya a una casa, pero no podemos estar seis meses esperando que tenga una. Y como el perro es de calle, si no se va en adopción, vuelve a la calle”. De hecho, confiesa que todos los perros que circulan, por ejemplo, por el centro, ya han sido intervenidos y cuentan con su chip.

Otros llamados recurrentes dicen relación con recibir cachorros, y el problema que trae es que “crecen en el canil y no aprenden a andar en la calle, por lo tanto, no lo podemos soltar si no es a un hogar. Limitamos el ingreso de cachorros, pero sí hemos tenido casos de que los dejan amarrados afuera, como sucedió en diciembre y que la única forma de que salga es en adopción”, indica Alvarado. A esa dificultad se suma que actualmente hay muchas agrupaciones y adopciones que se comunican a través de redes sociales, lo que no sucede en el canil municipal, donde mucha gente no se entera que pueden adoptar un perrito de ahí. Al final, la difusión termina quedando en manos de los encargados del centro.

Cambios no siempre
para mejor

Aunque pudiera pensarse que la Ley de Tenencia Responsable contribuyó precisamente a la responsabilidad, lo cierto es que pese a los muchos operativos que se hicieron, Claudio Pareja opina que “se empezaron a ver más perros en la calle, porque hubo gente que, como no se quiso hacer cargo producto de la ley, empezaron a haber más en las poblaciones, porque si no, te multan. Ahora, que eso no se aplique o haya tiempo para fiscalizar, es otra cosa”. Es más, llegaron a tener 120 perros, y obviamente tienen que velar por su bienestar. Por lo mismo, tienen recreos en que pueden salir a correr, lo que se va determinando entre los que se lleven bien, con el objetivo que ninguno permanezca 24 horas encerrado. 

Otro problema, muy propio de la región, es la población flotante, “gente que viene por temporada, adopta un perrito, se va y lo deja abandonado, llegan muchas denuncias por eso”, lamenta Natalia Alvarado. Las mayores denuncias de perros  abandonados se reciben desde el sector sur de Punta Arenas, especialmente de Avenida Frei al poniente y zonas rurales, aunque en ese punto, advierten que el Sag debe hacerse cargo de este creciente problema de los perros asilvestrados

Indican también, que hay gente que denuncia simplemente porque no le gusta el perro del vecino, y por ello se estableció un sistema más formal. El equipo técnico debe verificar la veracidad de la denuncia en terreno. Además, las atenciones son por prioridad. Primero, por atropello, luego, dependiendo de la disponibilidad, los perros agresivos, se espera el parte de la seremi de Salud y en tercer lugar, las perras preñadas o en celo.

El correo [email protected] está disponible para denuncias, mientras que para la adopción y consultas, se puede escribir a [email protected].

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