Comunidad selknam acusa trato denigrante al ser parte de Consulta Indígena
Con una incomprensible suma de dificultades, pese a la inmensa convocatoria que logró su colectividad ancestral en Porvenir, los representantes de la comunidad descendiente del pueblo originario selknam pudieron desarrollar su trabajo en la reciente Consulta Indígena Constituyente, que tuvo lugar en la sede local del Centro de Formación Técnica (CFT) de Magallanes el viernes pasado. La dirigenta de la Comunidad Selk’nam Covadonga Ona de Tierra del Fiego, Hema’ny Molina, calificó los obstáculos y la indiferencia sufridos por parte de la Convención Constitucional como “deningrante” para su pueblo.
“Logramos una muy buena convocatoria porque era híbrida (presencial y vía remota), 11 en sala y más de 20 personas de fuera, así que logramos los objetivos, pese a que hubo mucha traba para poder trabajar, resumió. Explicó que por fortuna salió todo bien, pese a que tropezaron con una serie de problemas para poder tener la instancia como pueblo selknam, aún no reconocido oficialmente en Chile.
Dijo que la actividad tuvo la invaluable ayuda de su asesor, Ariel León; del ministro de fe, Alejandro Núñez (por la Universidad de Magallanes) y del observador del Instituto Nacional de Derechos Humanos, Cristián Figueroa.
“A nosotros nos dificultaron todo, nunca nos dieron alguna facilidad, ni siquiera porque era un encuentro autoconvocado, no nos dijeron cómo poder hacerlo, no tuvimos ni una información y para peor, en la pestaña de la web no figuraba la opción ‘otros pueblos’, sólo para los pueblos reconocidos por la ley. Estamos muy molestos porque desde la Convención se nos prometió que nos iban a considerar en la Constitución, a darnos siempre las facilidades para ejercer nuestros derechos, entonces tuvimos que reclamar, hubo instancias que fueron muy duras para nosotros”.
Pueblo sin soberanía
“Al final se convirtió en un tema ‘paternalista’ porque nuestro asesor, que es quechua, tuvo que inscribir nuestro encuentro, es decir ni siquiera tuvimos la soberanía de hacerlo como encuentro selknam y eso es denigrante. O sea, el Estado ha sido paternalista siempre y ahora tuvimos que tener un apoderado, en circunstancias que en otras consultas en que hemos participado nunca pasamos una situación como ésta”.
“Incluso ahora, que es simbólicamente diferente, que era una convocatoria desde la Constituyente, tuvimos que tener apoderado, lo que fue un primer trago muy amargo. Y lo otro, la indiferencia, porque debimos reclamar para que nos contesten, porque nunca respondieron los correos en forma oficial, me dieron las indicaciones por teléfono, ¡todo mal!”, agregó la representante étnica fueguina.
Detalló que Carlos López, el encargado de la Zona de Magallanes de la Consulta Indígena, vía telefónica les dijo que no había recursos para los autoconvocados, así que no les llegó ni un lápiz. “Si tuvimos un rico cofee break 2 veces fue por la amabilidad del gobierno regional, único aporte económico del evento, que se extendió desde las 10 de la mañana hasta las 19,30 horas. Y sé que el Gore también presionó después que hablamos con ellos, porque nos tenían considerados para este encuentro, también para ellos fue una sorpresa que no pudiéramos inscribirnos”, añadió.
Terminó reiterando que participar en la convocatoria fue difícil, comparándola a “un parto duro”, ya que las mayores trabas llegaron desde la propia Convención Constitucional. “La consulta estuvo mal planteada y mal implementada, no por mala intención sino por inoperancia, porque los encuentros autoconvocados se orientaron con la posibilidad inmediata de inscripción para los pueblo reconocidos”.
“No había un mecanismo para los no reconocidos, que éramos los únicos, y si la hubo, nunca nos la dijeron, pese a que hicimos todo tipo de consulta para que nos orienten, y nunca lo hicieron. Al final, después de tanto insistir, vía telefónica el señor Barrera me dice ‘no, es que tienen que conseguir a alguien de otro pueblo para que los inscriba’. ¿Qué respuesta es ésa?”
“Y hasta hoy no nos llega en forma oficial ‘Pueblo selknam’ o ‘Comunidad Covadonga Ona fue inscrita a través de…’, todo ha sido de modo no oficial y casi como un favor. Y esa situación es de verdad denigrante”.
La consulta para los selk’nam fue con autofinanciamiento, los aportes del gobierno de la región, los apoyos de DD.HH., de la Umag, de la Fundación Hach Sayé y del CFT. En definitiva, la presidenta de “Covadonga Ona” se siente satisfecha por la alta convocatoria lograda y porque se completó en una jornada todo el trabajo demandado, con mucho interés de los participantes presentes y conectados vía Zoom.
Colectividad mapuche-huilliche de Magallanes entró a
última hora
Sólo de modo presencial y con más de una decena de convocantes comenzó a efectuar su tarea de Consulta Indígena la colectividad mapuche-huilliche, aseguró la presidenta de la Asociación Jowskén de Porvenir, Alicia Pérez.
Su trabajo se iba a prolongar por tres jornadas vespertinas, a diferencia del pueblo selknam, que lo hizo en un solo día, durante más de 9 horas.
Detalló que el CFT fue la primera entidad que colaboró en ceder sus instalaciones, cuando la Consulta Indígena se confirmó, ya que primero no se iba a hacer. “Pero fue el organismo que está en la Convención Constitucional quien determinó que se haga, porque se necesita ver el parecer de los pueblos indígenas sobre lo que se incluirá en la Constitución”.
“Se dieron cuenta que debían consultarnos, porque rige el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que obliga a consultar a los pueblos originarios en los países donde está implementado. Luego de eso formaron la comisión y se hizo todo muy rápido, por eso no ha habido una cosa fluida, como está explicado en las bases. Incluso en nuestra región no la iba a haber, pero tenemos la convencional yagán que planteó que se debía incluir al pueblo mapuche de Magallanes”, explicó.
Consultada por los obstáculos que tuvo la comunidad selknam, señaló que “obviamente iban a tener problemas porque aún no son reconocidos en la ley. Hay 10 pueblos no más y son los que podían participar de esta consulta, se supone. Seguramente se debe a los recursos, porque al no estar reconocidos quizás no podían justificar esos fondos, que son para los ‘coffee’, las colaciones y el asesor”, previó la dirigenta indígena.